¡Los malditos penaltis!
EL TRICOLOR LLEVÓ AL LÍMITE AL ACTUAL MONARCA OLÍMPICO, PERO LOS 11 PASOS FUERON LETALES
Los fantasmas de antaño revivieron. México se quedó en la orilla de buscar la medalla de oro tras perder en tanda de penaltis frente a Brasil. El Tricolor no fue mejor a la Verdeamarela, pero supo alargar el juego hasta las instancias finales. Los aztecas erraron. Lalo Aguirre abrió la tanda y falló con un tiro que careció de potencia y colocación. Enfrente empezó Dani Alves, la diferencia fue titánica. Johan Vásquez hiló otro yerro. Brasil no falló ninguno de sus tiros. Memo Ochoa adivinó la trayectoria de todos, sin embargo, no pudo desviarlos. El 4-1 derribó las ilusiones de pelear por el metal dorado. México se tiene que conformar con buscar la presea de bronce. El podio sigue al alcance, pero no en el sitio anhelado.
La Verdeamarela impuso respeto. Los brasileños le enseñaron a México su velocidad y regates todo el tiempo. Dani Alves llevó la batuta, pero fueron Richarlison, Paulinho y Claudinho los que pusieron en serios aprietos a la zaga mexicana.
Brasil llevó el ritmo del juego. Los seis goles que le metió el Tricolor a Corea del Sur quedaron para la anécdota. El partido en Kashima fue otro.
Era cuestión de tiempo para que Ochoa entrara en escena, Arana con un tiro en el área exigió al portero del América.
México estuvo asustado, pero aguantó hasta un penalti que el VAR revirtió.
Ese momento fue un parteaguas en el juego. México tomó un impulso. Romo culminó con un tiro a gol una jugada y después Antuna se quedó a nada del 1-0.
El empate sin anotaciones provocó fricciones. Las tarjetas amarillas cayeron a racimos en el complemento. Lainez entró en búsqueda de refrescar el ataque, igual Carlos Rodríguez y el Canelo Angulo.
El tiempo transcurrió y la red no se movió. La tensión, los nervios, todo llegó a Kashima. Brasil provocó sustos durante todo el complemento, incluso el palo salvó a los nuestros en un cabezazo de Richarlison que superó a todos.
El empate sin anotaciones alargó el
VOLANTE DE MÉXICO
juego a tiempo extra y después a penaltis Brasil fue perfecto. Nadie falló. México erró dos tiros, Eduardo Aguirre enmudeció y Johan Vásquez no pudo firmar su gran partido con una pena máxima. Ochoa se lanzó siempre al lado correcto, de nada sirvió.
El Tricolor llevó al límite al campeón y se despidió de la pelea por el oro, el bronce, ante los locales, lo esperará el viernes.