El autoritarismo presente en la LXV legislatura de la cámara de diputados
El pasado 1 de septiembre, en la primera sesión ordinaria de la LXV Legislatura de la Cámara de Diputados y tras más de nueve horas de debate, el autoritarismo por parte de Morena una vez más se hizo presente con la aprobación irregular de la nueva Ley de Juicio Político y Declaración de Procedencia, que a su vez, elimina a la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos por estar desactualizada y generar conflictos en el momento de su aplicación.
El objetivo de la creación de la nueva ley cobra relevancia debido a la necesidad de regular, actualizar y definir los procedimientos para que los servidores públicos puedan ser sancionados en caso de cometer faltas que repercutan en el interés público durante el ejercicio de sus funciones, de hallarse culpables podrían ser, según sea el caso, desaforados, destituidos de su cargo e inhabilitados para ocupar cualquier cargo público durante un periodo de 10 a 30 años, además de ser juzgados según las leyes penales aplicables. Este proceso se llevaría a cabo ante el Congreso de la Unión, es decir, ante la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores.
Si bien, la creación de esta ley es de suma importancia para el combate a la corrupción y a la impunidad que ha imperado en nuestro país, existieron diversas irregularidades en cuanto a su discusión y aprobación en la Cámara Baja. En primer lugar, el grupo parlamentario de Morena sin consensos ni debate previo con los partidos de oposición, llevó ante el pleno un dictamen que a todas luces violentó el reglamento interior de la Cámara de Diputados, incurriendo en la ilegalidad procedimental y en la imposición de un debate de madrugada, con premuras y que sólo responde a deseos personales.
En segundo lugar, no existió un análisis previo que permitiera se escucharan las voces y las opiniones de los diversos grupos parlamentarios, así como la opinión de expertos en el tema y de la ciudadanía para que en conjunto se hiciera la formulación y aprobación de esta ley apegándose al procedimiento correcto, así como, procurando en todo momento el respeto a la pluralidad de ideas siempre buscando el bien común.
No obstante, nos encontramos de frente con lo que ha caracterizado al gobierno de la mal llamada cuarta transformación, el autoritarismo, la improvisación y la simulación de procesos democráticos que sólo perjudican al federalismo, a las funciones de los poderes de la unión y a la autonomía de las instituciones ya que en la redacción de la nueva Ley de Juicio Político y Declaración de Procedencia nos encontramos con vicios que ponen en riesgo la parcialidad del procedimiento, el respeto a los derechos humanos y el respeto al sistema de pesos y contrapesos.
En consecuencia, los diputados del PAN nos opusimos rotundamente a la aprobación de la ley en comento por no apegarse a la normatividad establecida y por no justificar la urgencia de haber llevado el tema ante el pleno de la Cámara de Diputados en la primera sesión ordinaria cuando aún ni siquiera se han constituido las comisiones legislativas. Personalmente, considero que no se debe seguir gobernando a capricho y cerrazón, por lo que continuaré en la lucha para combatir las decisiones tomadas unilateralmente y que tanto afectan a nuestra ciudadanía.