Bajo ingreso tras reabrir los cruces
Fue poca la actividad, un panorama muy distinto a como lo anticiparon las autoridades de México y EU
La avalancha de gente y puentes colapsados que se esperaban ante la reapertura de los cruces fronterizos no sucedió; en las primeras 24 horas de que se reabrió el cruce a personas con visa de turista, el panorama lució muy tranquilo en los puentes fronterizos. En marzo del 2020 se cerraron cruces fronterizos para actividades no esenciales y el pasado domingo a las 10:10 de la noche se reabrieron.
Fue poca la actividad que registraron los puentes con respecto a personas con visa, un panorama muy distinto a como lo anticiparon las autoridades tanto de Estados Unidos como de México, quienes esperaban largas filas, de hasta 5 horas.
En el Puente Santa Fe, fueron aproximadamente cuarenta personas las que cruzaron en la primera hora de reapertura, los cuales mostraron su visa y su comprobante de vacunación, requisito indispensable para visitar Estados Unidos.
Agentes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, Secretaría de Seguridad Pública Estatal y Guardia Nacional resguardaron los cruces internacionales desde las 22:00 horas del domingo, cuando se dio la reapertura.
La instrucción fue vigilar los puentes y estar al pendiente de cualquier incidente, esto ante la posibilidad de que se presentarán disturbios en autos o se diera la presencia de migrantes que intentarán cruzar, como en otras ocasiones. Los agentes municipales estuvieron recorrieron las inmediaciones de los puentes Santa Fe, Libre y Zaragoza, mientras que los estatales y efectivos de la Guardia Nacional se postraron a la altura de las garitas, como ocurrió en el puente de la avenida Juárez.
Para la mañana del lunes, oficiales de la Coordinación de Seguridad Vial se encargaron de vigilar estos mismos cruces internacionales, pero contrario a lo que se esperaba, durante las primeras horas del día no se incrementaron las filas y en su mayoría los que cruzaban eran residentes o ciudadanos norteamericanos.
Autoridades municipales habían pronosticado tiempos de espera de hasta cinco horas para cruzar.