María Rojo regresa a las telenovelas
La actriz se integra al elenco de Mi fortuna es amarte, en sustitución de la fallecida Carmen Salinas
El pasado lunes se transmitió la primera participación de María Rojo en la telenovela "Mi fortuna es amarte", donde sustituye a Carmen Salinas (quien falleció el pasado 9 de diciembre), en el papel de Doña Magos.
Con este personaje la actriz regresa a las telenovelas, luego de siete años de ausencia, hecho que la llena de alegría, pues además de haber sido bien recibida en Televisa, le permite seguir haciendo lo que ama. "A mí me gusta actuar, vengo de una temporada de cinco años de la obra 'Made in México', que también me encanta. Eso quería hacer desde niña, actuar", comentó en entrevista con El Sol de México. "Me da mucho gusto volver a las telenovelas".
Aceptar el papel no fue una decisión fácil, pues cuando recibió la llamada de Nicandro Díaz, doña Carmen todavía seguía con vida. Sin embargo, fue el carisma del personaje lo que le hizo dar el sí, pues considera está muy bien escrito.
Asimismo, reconoció el trabajo que su predecesora ha hecho a lo largo de los años y afirmó que deja una huella imborrable en todos los proyectos donde participó. "Inolvidable será ella, no nada más en este personaje, sino en todos los que hizo".
"Carmen nada más había una, yo haré lo que pueda. A mí creo que me quiere la gente, o al menos me ha aguantado mucho tiempo, mis películas están entre las mejores de México, siento que tengo cierta aceptación del público".
La relación profesional entre la actriz y doña Carmen comenzó en 1988, cuando actuaron juntas en la película "Día de muertos" de Luis Alcoriza, y posteriormente colaboraron en "Danzón" (1991) y la obra "Cada quien su vida".
Al tener tantos recuerdos y anécdotas al lado de la intérprete de la Corcholata, María se siente muy honrada de poder cerrar la historia de Doña Magos, pues la recuerda con mucho respeto y cariño.
"Me invitó a develar unas placas de Aventurera, una vez cuando fueron todas las rumberas, todavía vivía Ninón Sevilla, como tres veces fui a la obra. También cuando le dimos el Ariel de Oro a Ernesto Gómez Cruz, ella lo entregó y platiqué con ella, y la última vez que hablamos fue por teléfono".
Carmen nada más había una, yo haré lo que pueda. A mí creo que me quiere la gente, o al menos me ha aguantado mucho tiempo".