Más moderna y conectada
La última ejecución de este gran SUV presenta un arsenal de conectividad y equipamiento tecnológico para una experiencia superior en cada viaje
Cuando hablamos de Chevrolet Suburban lo primero que viene a la mente es su tamaño imponente, pero desde que la décimo segunda generación vio la luz no solo se hicieron mejoras en diseño y apartado mecánico, tecnológicamente se renovó por completo para ofrecer mayor conectividad y entretenimiento en el trayecto; así lo experimentamos en una prueba de manejo de la versión High Country, la más lujosa y completa de la gama.
Lo primero que notamos es la amplitud y la calidad de materiales en el habitáculo como la piel café con costuras expuestas; además de un tablero con pantalla táctil a color de 10.2 pulgadas del sistema de infoentretenimiento, que incluye Android
Auto y Apple Carplay inalámbricos. Desde esta pantalla se manipula de manera intuitiva el apartado multimedia, el aire acondicionado, la calefacción de los asientos y las diferentes vistas que nos da la cámara 360°.
Para facilitar el manejo, el conductor tiene tras el volante un panel de instrumentos con pantalla de 8 pulgadas con head-up
display, un nuevo selector de velocidades mediante botones y en el espejo retrovisor, una segunda cámara de visión trasera.
Uno de los puntos que más destaca es la cantidad de aplicaciones que dispone como Alexa, Google y Siri, aunado a los servicios OnStar que la convierten en un
hotspot Wi-Fi; durante la prueba conectamos una laptop de trabajo y la conexión de internet fue estable.
No todas las amenidades están al frente, las plazas traseras gozan de tecnología como dos pantallas de 12.6 pulgadas a las que puedes conectar de todo, desde USB, proyectar el celular, ver tu series favoritas y conectar una consola de videojuegos. Un reflejo de la modernidad.