Cumple 107 años hidroeléctrica de La Boquilla
Inició como un proyecto para aprovechar las aguas del río Conchos, con la finalidad de brindar energía a la industria minera metalúrgica del estado
DELICIAS. Este mes de junio se cumplen 107 años desde que inició la generación de electricidad en la presa Boquilla, con el propósito de suministrar energía a la industria minera en Naica y a la fundición de Ávalos en la ciudad de Chihuahua, donde se procesaban los minerales provenientes de varias partes del estado.
Catorce años más tarde, en 1929, la Comisión Nacional de Irrigación (CNI) comenzó a planear la apertura de un nuevo distrito de riego iniciando con una superficie de 39 mil 700 hectáreas y la fundación del nuevo asentamiento humano que se convertiría en la ciudad de Delicias.
Este antecedente histórico se recuerda porque la presa Boquilla dio origen al Distrito de Riego 005 Delicias a inicios de la década de 1930, convirtiéndose en el sustento de la actividad agrícola de los municipios de San Francisco de Conchos, Camargo, La Cruz, Saucillo, Rosales, Meoqui y Julimes.
Por esta razón, el Consejo Directivo de la Sociedad de Responsabilidad Limitada Unidad Conchos, que encabeza Mariano Jáquez Gandarilla, y los presidentes de los módulos que lo conforman, recordaron con beneplácito este acontecimiento importante en la historia de la región.
Otro dato que enriquece la historia de este cuerpo de agua, es que la presa Boquilla fue reconocida como Patrimonio Mundial de la Irrigación en el mes de octubre del año 2017 por las características que guardan en el tiempo de su construcción y su utilidad para darle vida a la agricultura, actividad que ha sido desde la
LOS GOBIERNOS postrevolucionarios vislumbraron el potencial de la presa para dar vida a un nuevo distrito de riego, por lo que la administración del embalse pasó al gobierno federal.
apertura del distrito respaldo económico de la región centro sur. Por ello, la SRL Conchos consideró que es importante traer al presente la historia que fomenta el sentido de pertenencia de una zona que, por poco más de ochenta años, sigue con mucho tesón en la práctica de la agricultura, actividad que es la encargada de generar la alimentación en el mundo entero. La construcción de La Boquilla, enclavada en el municipio de San Francisco de Conchos, comenzó en el año de 1910 como un proyecto para generar electricidad aprovechando las aguas del río Conchos, con la finalidad de brindar energía a la industria minera metalúrgica del estado.
Fue una empresa de origen canadiense la que ganó la concesión para construir la presa. Para este fin, en septiembre de 1906 se formó en la ciudad de Camargo la Compañía Agrícola y de Fuerza Eléctrica del Río Conchos, pero los trabajos de construcción arrancarían cuatro años después y concluirían en 1915.
Años más tarde, los gobiernos postrevolucionarios vislumbraron el potencial de la presa que dio empuje a la agricultura para dar vida a un nuevo distrito de riego, por lo que la administración del embalse pasó al gobierno federal,.