El pasado 6 de junio
se cumplió un año de los resultados electorales en Chihuahua, en el cual los candidatos de Acción Nacional salimos en su mayoría favorecidos, desde la gubernatura, alcaldías hasta diputaciones locales y federales; parte de esos triunfos estuvieron respaldados por un mensaje muy claro, de ganar tendríamos la alta responsabilidad de defender las libertades, las instituciones, la democracia, el Estado de derecho y nuestra Constitución.
Ese fue el mensaje que con mucha claridad compartí en muchas reuniones con vecinos del Distrito 8 en la capital, y sigo teniendo esa claridad, de sobra sabemos que si perdemos todo ello, estamos perdidos. ¿Por qué llegamos a esta etapa de la moratoria constitucional?, muy fácil contestar esta pregunta: por la negativa rotunda al diálogo, acompañada de descalificaciones hacia quienes pensamos diferente y una falta constante de respeto al poder Legislativo, por parte del presidente y
sus cercanos colaboradores.
La moratoria constitucional es una respuesta de la coalición Va x México a la ciudadanía, a voces de expertos y también a un reclamo interno de algunos legisladores, que al ver el rechazo constante de Morena en la Cámara de Diputados, a las iniciativas que como oposición hemos presentado; a las más de mil reservas que nos negaron en el paquete económico y al repetido desprecio del federalismo, en donde han dejado sin presupuesto a Estados y Municipios.
La moratoria constitucional es también un recordatorio de que no se requieren por ahora reformas a la Constitución, sino un cabal cumplimiento de la misma, sólo recordemos cuántas veces ha sido violada en lo que va de la administración federal, para satisfacer los caprichos y locuras del presidente y su partido; aún cuando juraron cumplirla, no les importa pasar por encima de ella, si es para lograr sus fines más perversos.
Celebro que a través de esta moratoria a reformas constitucionales, así como sucedió el pasado 17 de abril con el voto en contra de la reforma eléctrica, la oposición sigue defendiendo la Constitución y a través de ella, a nuestras instituciones, y hoy por hoy defendemos al INE.
El país requiere resultados en salud, seguridad, en materia económica, nos urgen. Esto es en lo que los diputados de Acción Nacional estamos enfocados, porque sabemos que México no está bien, que está abandonado y sostenido con dádivas que pronto se terminarán. Las familias mexicanas requieren soluciones inmediatas, trabajaremos en ello, hasta donde nos alcance el aliento. Y sin importar lo que opine el presidente de esta moratoria, nuestra principal tarea como legisladores es proteger nuestra Constitución, y no moverle ni una coma, hasta en tanto tengamos la certeza de que las reformas propuestas beneficien al país. La moratoria es, pues, una nueva defensa a nuestra Carta Magna.