Cárceles estatales, sobresaturadas
En el Estado de México hay de dos a tres internos por cada espacio disponible, de acuerdo con el censo de Sistemas Penitenciarios del Inegi
CDMX. Los centros penitenciarios de 18 entidades federativas se encuentran sobresaturadas, revelan datos de los Censos Nacionales de Sistemas Penitenciarios en los ámbitos estatal y federal (CNSIPEE-F) 2022 que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En las cárceles estatales de Aguascalientes, Coahuila, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Sonora y Tabasco hay más personas privadas de la libertad que camas disponibles.
En el extremo, las cárceles del Estado de México presentan una saturación de 244 por ciento, es decir, que hay de dos a tres internos por cada espacio disponible. Le siguen Nayarit, con una sobresaturación de 180 por ciento y Durango, con 174 por ciento.
En contraste, los centros penitenciarios federales se encuentran a 55 por ciento de su capacidad y los centros especializados de tratamiento o internamiento para adolescentes no reportan hacinamiento, siendo los de Zacatecas los de mayor saturación con 87 por ciento de su capacidad.
El censo del Inegi también indica que los encarcelamientos crecen a ritmo constante desde que inició el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Sumando la población interna en centros penitenciarios y de internamiento para adolescentes, la cantidad de personas privadas de su libertad pasó de 196 mil 322
92
MIL 856 presos están sin sentencia
25
MIL 737 con sentencia no definitiva
101 MIL 138 con sentencia definitiva
personas en 2018 a 220 mil 420 en 2021, lo que representa 12 por ciento más.
Por sexo, la población masculina creció en el mismo lapso de 186 mil 162 personas a 208 mil (12 por ciento), en tanto que la femenina pasó de 10 mil 160 a 12 mil 420 (22 por ciento). Este grupo también se ha visto más afectado por la prisión preventiva.
De acuerdo con el estatus jurídico de las personas privadas de la libertad, 92 mil 856 se encontraban sin sentencia, 25 mil 737 con sentencia no definitiva y 101 mil 138 con sentencia definitiva. Esto implica que 42.1 por ciento de los internos no contaba con una sentencia, indica el Inegi. Comparado con 2020, la población privada de la libertad sin sentencia aumentó 7.6 por ciento.
En el caso de los hombres los internos sin sentencia representan 41.5 por ciento, en tanto que en las mujeres la proporción es de 52.9 por ciento.
El censo resalta que el número de incidentes al interior de los penales aumentaron en el último año. En los federales se contabilizaron 721 eventos en 2021 con respecto a los 656 registrados en 2020, en tanto que en los estatales hubo dos mil 119 casos el año pasado en comparación a los mil 660 contabilizados el año previo.