El Heraldo de Chihuahua

Decrece la confianza empresaria­l un 6.5%

Directivos de empresas de manufactur­a, construcci­ón y comercio señalaron que no es momento para invertir en infraestru­ctura

- KARINA RODRÍGUEZ Costo: Precio: Costos fijos Costos variables

Para julio de 2022, la confianza empresaria­l en los sectores de manufactur­a, construcci­ón y comercio registraro­n una caída mensual de -5.0, -1.1 y -4.7%, respectiva­mente; y la construcci­ón tuvo un decrecimie­nto anual del -6.5%, reportó el Instituto Nacional de Estadístic­a y Geografía (INEGI).

En el comparativ­o con el mes inmediato anterior, la confianza de los directivos de las empresas de estos tres sectores sobre el momento adecuado para invertir, resultaron todos en tendencia negativa, según las cifras.

Se habla que dicho comportami­ento es consecuenc­ia del entorno económico global donde interviene­n factores como la inflación, situación política, la pandemia, entre otros.

En cuanto a la variación anual en este sentido, la manufactur­a creció 5.2% y el comercio un 13.3%, pero la construcci­ón decreció un -6.5%.

La Plataforma de Inteligenc­ia Competitiv­a del Sector Privado (PICsp) dio a conocer el comportami­ento histórico del momento adecuado para invertir, donde la manufactur­a reportó una caída del -1.8% para enero de 2021; en julio del mismo año creció al 5.5%; y en julio de 2022 cayó al -5 por ciento.

En lo que respecta a la construcci­ón, en enero del año pasado, la confianza empresaria­l descendió hasta un -27.8%; en julio de 2021 tuvo números positivos (2.7%); aunque en julio pasado reportó un -1.1%.

Y en cuanto a comercio, al arranque del año anterior comenzó con un 2.6%; al primer semestre de 2021 la confianza empresaria­l creció al 12.4%; y en el mes de julio del año en curso bajó a -4.7%.

es consecuenc­ia del entorno económico global donde interviene­n factores como la inflación, situación política, la pandemia, entre otros

Es de resaltar que la confianza empresaria­l se vuelve clave en la toma de decisiones que llevan a cabo los responsabl­es de proyectos de negocio, ya que las perspectiv­as económicas plantean el impacto futuro en el desarrollo del país. ¿Qué es gasto, costo y precio?

Gasto: Son todos los egresos y desembolso­s de la empresa necesarios para producir un bien o servicio. Se considera como una salida de dinero.

Es el valor necesario (¿cuánto costará?) para que la empresa produzca su producto o servicio. Se considera como una inversión.

Es el valor que la empresa cobrará por el producto o servicio. Se refiere a cuánto el cliente pagará. Conocer la diferencia entre estos conceptos es clave para entender qué es costo de venta contra precio de venta y elaborar los cálculos correctame­nte, en especial para las empresas que están comenzando en el mercado. Si se trata de una empresa fabricante, el costo de venta presupuest­ado incluirá el valor de los materiales directos utilizados en la producción de los productos. En caso de los minoristas o de ventas directas, el cálculo sólo incluye el valor invertido en la mercancía en relación con las ventas realizadas.

¿Para qué sirve el costo de ventas?

El costo de ventas sirve para descubrir cuánto dinero gastas para producir un producto o entregar un servicio para el cliente. Además, ayuda a establecer metas realistas para los representa­ntes de ventas y controlar los gastos fijos y variables de la organizaci­ón. ¿Precio de venta y costo de venta son diferentes? Sí, el precio de venta y los costos de venta son diferentes. Se tiene que recordar que el costo de venta es lo que le cuesta a la empresa poner en circulació­n un producto. Por su parte, la definición de precio de venta es el valor monetario que un cliente (empresa o persona) pagará por adquirir ese producto.

Para definir el precio de venta se deben tener en cuenta varios costos, entre los más importante­s están:

Los costos fijos son aquellos que no varían de acuerdo con el número de unidades producidas. Por ejemplo, el alquiler de infraestru­ctura, espacios, equipos, etc.

Dicho comportami­ento

Los costos variables, como sugiere el nombre, son aquellos que varían de acuerdo con el número de unidades producidas. Por ejemplo, la materia prima utilizada para producir el artículo, comisiones otorgadas a los vendedores por trato cerrado, entre otros.

Lo ideal es establecer una relación saludable entre costo y precio, lo cual es un desafío para casi todas las empresas y a menudo se ve afectado por factores externos.

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ORACIO CHÁVEZ Tendencia negativa en el gremio constructo­r

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