Guerra urbana se ensaña con pobres de Haití
PUERTO PRÍNCIPE. Más de 3 mil personas desplazadas de la violencia entre bandas armadas en Puerto Príncipe, la capital de Haití, viven en condiciones inhumanas en la Plaza Hugo Chávez, ante la indiferencia de las autoridades de este país, sumergido en una grave crisis, con un alto costo para los más pobres.
Los desplazados, entre ellos cientos de niños, abarrotaron la plaza, ubicada en el barrio Tabarre y a menos de un kilómetro del aeropuerto, mucho de ellos con tan sólo lo que tenían puesto, sin agua ni comida, en medio del caos y la anarquía.
Huyeron de más de una docena de barrios de Cité-Soleil, sumidos en una guerra que este año se ha cobrado más de 300 vidas.
“El problema más grave es la alimentación y el sueño”, dice Kesnel Franck, de 49 años, padre de familia, a quien las intensas lluvias de estos días han obligado a permanecer horas de pie.
Muchos desplazados salen en la mañana a trabajar o hacer diligencias, por lo que es en la noche, a la hora de dormir, cuando se complica la situación. Muy pocos tienen una sábana para poner en el suelo o para cubrirse por la noche.
En estas condiciones, viven mujeres embarazadas, cientos de bebés, niños y discapacitados que huyen masivamente de las atrocidades de una guerra urbana entre bandas que se disputan los territorios.
Los desplazados denuncian el poco apoyo del Gobierno, que debería enviar al lugar a responsables del Ministerio de Asuntos Sociales y al Fondo de Asistencia Social, dice a Efe Jean Ernst Désilian, portavoz de un comité que gestiona el campamento.