El control de Guardia Nacional, a la Sedena
Reformas facultan a la GN intervenir en materia de seguridad pública en el ámbito local, así como auxiliar a Fuerzas Armadas en sus misiones PROTESTAS CONTROVERSIA
CDMX. A todo vapor y sin modificar una coma a la iniciativa presidencial, los grupos parlamentarios de Morena, PT, PVEM y PES en el Senado de la República perfilaban anoche aprobar por mayoría las reformas a la Guardia Nacional, mientras que las bancadas del PAN, PRI, MC y PRD proyectaban su voto en contra de esta legislación. Al cierre de esta edición seguía el debate en el Pleno.
Una vez avalado, el presidente de la Cámara alta, Alejandro Armenta Mier, estaría enviando el proyecto de ley al presidente Andrés Manuel López Obrador para su publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF). Al inicio de la discusión en el pleno, las bancadas oficialistas rechazaron una propuesta de moción suspensiva del líder de los senadores del PAN, Julen Rementería.
Las reformas avaladas establecen que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) asuma el control operativo y administrativo de la Guardia Nacional, organismo con mando civil que suplió a la Policía Federal y que fue creado apenas el 26 de marzo de 2019. Además, faculta a la Guardia Nacional a intervenir en materia de seguridad pública en el ámbito local, hacer uso de las armas que le sean autorizadas, así como auxiliar a las Fuerzas Armadas en el ejercicio de sus misiones. También establece que a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) le corresponderá formular la Estrategia Nacional de Seguridad Pública y la propuesta de Programa Nacional de Seguridad Pública, así como proponer al Ejecutivo federal la política criminal y las medidas que garanticen la congruencia de ésta entre las dependencias de la Administración Pública Federal.
En medio de protestas en el pleno de senadoras de Acción Nacional —quienes mostraron pancartas de tuits de hace algunos años del presidente López Obrador, y de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, donde rechazaban las tareas de las Fuerzas Armadas en labores de seguridad—, los senadores morenistas, petistas y “verdes” rechazaron que esta reforma busque la militarización del país. Damián Zepeda, senador del PAN, manifestó que con esta reforma “se busca la militarización del país”,
Claudia Anaya Mota, senadora del PRI, reprobó al gobierno federal por “no combatir la corrupción en los cuerpos policiales, ni establecer mecanismos de profesionalización y controles de confianza, pero sí de auspiciar la militarización de las fuerzas de seguridad”. Adelantó que el Revolucionario Institucional presentará una controversia constitucional para que sea la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) la que determine la constitucionalidad de las reformas a la Guardia Nacional.
Emilio Álvarez Icaza, senador del Grupo Plural, advirtió que reformar las leyes secundarias en materia de Guardia Nacional “contravienen a la Constitución y se hace un fraude constitucional, rompiendo el pacto social y estableciendo un precedente”. La premura por aprobar esta reforma —añadió— “tiene una visión política que se ve en actos partidistas en los que participa el comandante en jefe de la Guardia Nacional, como el discurso del secretario y general de la Sedena (Luis Cresencio Sandoval), invitando a la oposición a incorporarse a la denominada Cuarta Transformación”. José Clemente Castañeda, senador de Movimiento Ciudadano (MC), reprochó que el gobierno federal y los legisladores de Morena no hayan cumplido el compromiso de hace cuatro años, cuando se creó la Guardia Nacional.
“Hace cuatro años se aprobó la Estrategia de Seguridad y, posteriormente, la Guardia Nacional, con el objetivo de otorgar al gobierno federal los instrumentos para fortalecer las instituciones civiles de seguridad y se consolidara la Guardia Nacional, con el fin de asegurar la paz y seguridad en el país”, enfatizó. Antonio García Conejo, senador del PRD, emplazó a revisar la reforma constitucional de 2019, que creó la Guardia Nacional, frente al proyecto de ley que presentó el presidente López Obrador, ya que “lo que mandata la Constitución y la actual legislación no consideran la militarización de la seguridad pública, dado que se extinguen las facultades de la seguridad pública en materia de control y mando de la Guardia Nacional”. Al fijar el posicionamiento de la bancada de Morena, el senador Navor Alberto Rojas acusó a los grupos parlamentarios de oposición de tener una “doble moral”, ya que “cuando eran gobierno no escuchaban al pueblo y violentaban la Constitución, pero hoy precisamente refieren que se debe de respetar a la Carta Magna, a la población y a la legalidad”.
“Se hace un fraude constitucional, rompiendo el pacto social y estableciendo un precedente”
EMILIO ÁLVAREZ ICAZA SENADOR DEL GRUPO PLURAL