La iniciativa del inquilino de
Palacio Nacional, de pasar la Guardia Nacional al Ejército, es de facto la militarización del país, que tanto criticó durante muchos años y no sólo eso, cuando llegó de presidente dijo que su política jamás sería militarizar el país, que su política sería de abrazos y no balazos, que resultó una tragedia, que sólo sirvió para humillar a la Guardia Nacional y al Ejército.
Ahora resulta que después de atacar tanto a Felipe Calderón por haber sacado al Ejército a las calles, para detener a las mafias de los cárteles, ahora le da la razón.
Es inconstitucional este decreto administrativo, pero el presidente no tiene facultades constitucionales, debería haber cambiado primero la constitución, donde cuando se creó la Guardia Nacional, se establece con mucha claridad que es una institución de carácter civil, para defender a la población, que nunca funciono así, por la orden de abrazos y no balazos, pero sabiendo López que no tiene la mayoría calificada en ninguna de las dos cámaras del Congreso, prefirió violar la Constitución y hacer el cambio de mandar la Guardia Nacional al Ejército, mediante decreto y el siguiente paso es ahora sí sacar al Ejército a las calles.
Al Ejército lo ha empoderado como nunca, les dio la construcción del aeropuerto AIFA, el Tren Maya, la refinería Dos Bocas y además las decretó como obras de seguridad nacional y por lo tanto no tienen que rendirle cuentas a nadie, lo único que se sabe es que todas se han excedido en su presupuesto por algunos miles de millones de pesos, pero eso sí el señor López dice que el Ejército es muy honesto. Los generales y la élite del Ejército han recibido carretadas de millones de pesos, que no tiene obligación de rendirle cuentas a nadie, la puerta a la corrupción.
Cuando el Ejército ha salido a las calles a suplir las incapacidades de las autoridades civiles, las quejas de violación a los
La militarización del país es inminente y de ahí a la dictadura, no falta nada. Necesitamos unirnos todos en contra.
derechos humanos han crecido enormemente, porque los soldados no respetan a nadie, sólo siguen órdenes, porque para eso están entrenados, y en las calles presumen sus armas listas para disparar, que no amedrentan a los malandros, sino a la población civil y de ahí a la dictadura no les falta nada.
Se imaginan si ya el Ejército sale decidido y con la orden de acabar con los cárteles de la droga y se llegara a perder la batalla, ya nos convertiríamos en un narcoestado, que a la mejor es lo que quiere López, ya ven cómo ha defendido a los del Chapo Guzmán, soltando a Ovidio su hijo, sin tener la autoridad de hacerlo, cómo ha subido hasta Badiraguato a saludar a la mamá del Chapo, cómo los ha defendido diciendo que son seres humanos que también debemos defenderlos y así sucesivamente, con mucho descaro no sólo los ha protegido, sino los ha apoyado con carreteras (de Badiraguato a Guadalupe y Calvo y el anuncio de la ampliación de la carretera de Sonora a Chihuahua) para que puedan transportar sin problemas su mercancía.
La militarización del país es inminente y de ahí a la dictadura, no falta nada. Necesitamos unirnos todos en contra.