Mortífera, política migratoria actual
Para el investigador Josiah Heyman es necesaria una visión más amplia de relación y no de exclusión
El elemento más mortífero de la migración no autorizada es el cruce de la frontera, afirmó el doctor Josiah Heyman, investigador del Departamento de Sociología y Antropología de la University of Texas at El Paso al participar en el I Congreso Binacional Migración, Movilidad Humana y Humanidades que organizan la Facultad de Filosofía y Letras de la UACh, UTEP y la UNAM.
El investigador destacó que actualmente la política migratoria hace más difícil, costoso y mortífero el tránsito de personas en situación de movilidad, por lo que propuso que es necesario que la retórica cambie, que se proporcione una visión amplia de lo que es una frontera de relación y no de exclusión, que justifique una reforma antimuerte y pro migrante, para dejar de culpar al exterior de la falta de responsabilidad que tiene EUA, lo que sólo ha fortalecido el mercado negro, al crimen organizado que gana alrededor de 13 mil millones de pesos por el tráfico de las personas, a los coyotes e incrementa la mortalidad de las personas.
Mencionó que EUA ha magnificado la situación de criminalidad por cuestión de migración, donde está usando a México como barrera para evitar que la criminalidad se incremente, ya que actualmente la frontera se ha definido como un espacio político e, incluso, dijo que hace falta que EUA se preocupe porque todas las personas tienen derecho básico a la vida.
El doctor Heyman mencionó que se requiere un verdadero cambio en la política migratoria, que impida que las personas migrantes sigan sufriendo por ser abandonados, en muchos casos tras el sufrimiento son deportados.
El investigador afirma que la política de migración humana necesita basarse en una visión positiva de las fronteras como un espacio de relación, donde se hace necesario una práctica menos mortal. Aunque admite que es utópico, también es necesario basarse en las realidades que se viven en las fronteras.
Actualmente, las fronteras son líneas de exclusión y en varios aspectos son responsables de muchas muertes de las personas en situación de movilidad. Sólo dividen “Los muros y la aplicación de la ley son la materialización de este pensamiento divisorio”.
La frontera entre México y EUA atrae connotaciones negativas, ya que se destaca que las personas en situación de movilidad son criminales o terroristas, pero el investigador detalló que EUA amplifica la situación como una manera de justificar y negar la realidad que ya vive su país en cuestión de violencia. “Pensar que los problemas sólo provienen del exterior oculta la culpabilidad”, destacó el académico, es una manera de culpar a externos de lo que ocasiona la sociedad doméstica.
Además dijo que la población migrante genera aspectos muy positivos en el ámbito económico y demográfico, “La migración es uno de los problemas transfronterizos más fáciles de resolver en comparación a los problemas ambientales, como el cambio climático que está vinculado a nuestra tecnología y economía”.
Finalizó diciendo que las políticos actuales están abocadas a crear una crisis, que sólo fortalece el mercado negro, el crimen organizado y obligar a las personas en situación de movilidad a buscar otras maneras de ingresar a EUA.
"OPORTUNIDAD ECONÓMICA"
La migración actual debe verse como una oportunidad económica y social en lugar de como una problemática, afirmó David Stout, El Paso County Commissioner, en su participación en el I Congreso Binacional de Migración, Movilidad Humana y Humanidades. Stout comentó en su participación de la mesa de expertos sobre la “Caravana migrante: Las respuestas de México y Estados Unidos”, que el problema de la migración no es un problema exclusivo de México y Estados Unidos, sino que es una condición que se vive alrededor del globo, por lo que es necesario que se trabaje en conjunto abandonando las políticas antiguas y xenofóbicas para ver la inmigración como una oportunidad en lugar de un problema.
Lo anterior es una problemática que se podría solucionar al empezar a pensar en las personas en situación de movilidad como una oportunidad de ampliar la mano de obra en las empresas tanto de México como de Estados Unidos, en lugar de verlo como una problemática desde el punto racista y xenofóbico de antiguas políticas.
David Stout hizo hincapié en que la escasez de mano de obra en las industrias podría resolverse si a los migrantes se les garantizara una visa de trabajo, dado a que la mayoría las personas que se encuentran en estos puestos son justamente indocumentados, tanto provenientes de Centroamérica como de los mismos mexicanos que migran a Estados Unidos.
Por otro lado, el que las políticas se ajusten en pro de los inmigrantes, también puede ser de gran ayuda para combatir la inseguridad.