El ciberacoso, un victimario silencioso
Especialistas destacan la denuncia como un punto de quiebre para revertir el delito contra las mujeres
Especialistas abordaron las causas y destacaron la denuncia como un punto de quiebre para revertir el delito contra las mujeres.
México se encuentra en el top ten de los países con alta incidencia del delito de ciberacoso o violencia digital, donde las niñas y mujeres son las principales víctimas. Actualmente, se ha detectado que siete de cada 10 jóvenes han sufrido abuso en línea, situación que crece con el confinamiento a causa de la pandemia.
El Consejo de Género de la Organización Editorial Mexicana (OEM), presidido por la directora general editorial Martha Ramos Sosa, abordó el tema en su sesión del jueves pasado. Para ello se contó con la participación de Judith Tapia, Gabriela Ramírez, Sandra Muñoz, Leslie Jiménez, Éricka Mercado y José Enrique Juárez, representantes de organizaciones de la sociedad civil y de la Fiscalía General de la Ciudad de México.
Los especialistas coincidieron en que el punto de quiebre en este delito es la denuncia, la cual es importante facilitar para que los acosadores reciban la sanción correspondiente. Lo primero es reconocer la gravedad del problema, que de lo virtual —donde se ataca el autoestima y dignidad de la víctima—, pasa a lo físico con franca violencia.
“Hay que reconocer que la tecnología y los medios de comunicación brindan a los acosadores posibilidades ilimitadas de espiar a sus víctimas”, resaltó Judith Tapia, gerente de ventas del Mercado de Consumo E-Commerce de la empresa Kaspersky México.
Señaló que el stalkerware es un software de vigilancia que generalmente se vende en internet de manera abierta y es una forma de espionaje que se usa contra las mujeres. Está asociado con la violencia de género porque el acosador mantiene una vigilancia permanente de su víctima.
México se encuentra entre los primeros cinco países en el mundo con más uso de stalkerware, sólo después de Rusia, Brasil, Estados Unidos e India.
TAN DESTRUCTIVO COMO EN LA VIDA REAL
“No podemos minimizar el ciberacoso”, destacó Gabriela Ramírez del Centro de Información ONU México y consejera permanente de la OEM.
“Durante la crisis de la Covid-19, todos están usando más el Internet y por ende, se convierten en víctimas potenciales de amenazas, acoso y ofensas sexuales; este tipo de violencia de género en línea es tan destructiva como en la vida real”.
Ramírez subrayó que el entorno de internet ha facilitado que se cometan actos de violencia digital sin consecuencias, donde las mujeres son las principales víctimas, sobre todo quienes expresan su opinión, entre ellas periodistas y políticas.
“Una de las repercusiones más importantes es la autocensura, ya que a través de los ataques se busca mantener a las mujeres silenciadas, incluso muchas abandonan las plataformas tras sufrir algún ataque y sufren consecuencias psicológicas, físicas, sociales y sexuales”.
La abogada y activista Leslie Jiménez Urzúa señaló que en los últimos años se han incorporado figuras jurídicas para visibilizar la violencia de género, donde el Campo Algodonero en Ciudad Juárez fue un caso emblemático que abrió la puerta para la tipificación del feminicidio.
“Lo que tenemos que hacer es empezar a cuestionarnos qué tipo de derecho penal queremos para nosotras. ¿Uno que busque un castigo sin razón o uno que busque la reparación integral del daño?”
Jiménez apuntó que es necesario que se replantee el trato que deben recibir las víctimas a fin de evitar revictimizaciones.
Por su parte, Sandra Muñoz, del Frente por la Sororidad, pidió dar seguimiento a la Ley Olimpia, caso que puso el tema de la ciberdelincuencia sobre la mesa y en lo cual México tiene 20 años de atraso.
La Ley Olimpia generó algunas reformas en el Código Penal de la Ciudad de México, que se engloban en los delitos contra la intimidad. Es un avance pero aún muy limitado, enfatizó Muñoz.
José Enrique Juárez Cienfuegos, director de Información e Inteligencia Cibernética de la Fiscalía General de la CdMx, informó que al estar tipificado el ciberacoso y la ciberdelincuencia se aspira a una atención integral, aunque falta capacitación en la materia y contemplar múltiples formas del acoso virtual.
A su vez, la agente especializada Éricka Mercado Zárate, ministerio público y responsable de delitos contra la intimidad, ponderó que la contención psicológica a las víctimas es fundamental para que sigan el proceso sin sentir culpa.
“A través de los ataques se busca mantener a las mujeres silenciadas” GABRIELA RAMÍREZ CENTRO DE INFORMACIÓN ONU MÉXICO
México está entre los primeros cinco países en el mundo con más uso de stalkerware, sólo después de Rusia, Brasil, EU e India