Moda ejecutiva femenina
n los últimos años, el código de vestimenta ejecutivo se ha relajado en algunos sectores y ya no es tan estricto como antes. Si bien este hecho es cierto, actualmente aún tiene una gran relevancia en algunas empresas y siempre es recomendable conocer los aspectos de la vestimenta formal para un entorno profesional, moda ejecutiva.
No cabe duda que en el mundo laboral la apariencia personal juega un rol crucial. De hecho hay un interesante estudio de la Universidad de Chicago que menciona que la imagen que proyectas en la oficina tiene un impacto financiero en tu salario mucho mayor de lo que imaginas. Y la verdad es que personalmente creo que ese impacto va más allá del sueldo o remuneración, sino sobre todo en tu autoestima.
El estudio entre varias variables menciona que alguien “agradable a la vista” es también percibida como más inteligente, más sana y con mayores capacidades sociales que el resto. Esta teoría en psicología se conoce con el nombre de “Efecto de Halo” que refiere a que tendemos a atribuir características positivas a la gente que visualmente es más atractiva o bien proyecta una mejor imagen, y pasa todo lo contrario cuando vemos a alguien descuidado donde las características de índole más negativas tienden a surgir.
La mujeres en cargos altos, directivos o con mucha exposición por lo general está familiarizadas con este concepto, de ahí que sus atuendos son infalibles, perfectamente cuidados.
“Puedes conseguir lo que quieras si vistes para ello”
PARA TRIUNFAR EN EL ÁMBITO LABORAL, DEBEMOS CUIDAR: VESTIR PARA LA OCASIÓN
Tanto el clima, el lugar, como el tipo de evento son los factores fundamente para elegir un atuendo. Por un lado, se debe evaluar que el atuendo vaya de acuerdo con la temperatura y por otro lado el tipo de actitud que se requiere transmitir: autoritaria o accesible. Para los climas fríos, se recomiendan colores más sobrios (como el negro y el azul) y para los climas más calurosos blanco, nude o crema. Los tonos fucsia o rojo pueden lucir muy bien en estaciones invernales.
NADA MUY REVELADOR
No vestir faldas demasiado cortas o blusas escotada para ir a trabajar. La ropa interior no debe notarse.
MAQUILLAJE
Llevar maquillaje si, pero con discreción. El maquillaje es fundamental, pero evita siempre el exceso. Juega con una boca más encendida, una sombra nacarada o un lindo delineado de ojos. Lo importante no hacerlo todo al mismo tiempo. Un detalle llamativo es suficiente.
PELO
El pelo se sugiere que en ocasiones más formales se lleve recogido para que la cara sea visible, en caso de que vaya suelto, la altura ideal es a los hombros y en tonos los más naturales posibles.
ACCESORIOS
La joyería es un gran aliado de la mujer que trabaja, le da un sello propio. Unos lindos pendientes, un collar, broche o anillo vistoso le darán personalidad a tu atuendo. Evitar en lo posible las fantasías o imitaciones, porque restan seriedad. Un buen aliado es un lindo reloj. Invierte en él un poco más.
PERFUME
Las fragancias son parte de tu personalidad, pero no exageres al aplicarte, ni uses aromas demasiado fuertes, especialmente si tu oficina es muy encerrada y/o trabajas con más personas. Lo ideal es que sea un suave aroma.
JEANS O PANTALÓN DE MEZCLILLA
Hay empresas que lo permiten, sólo cuida que los que uses no estén rotos, se encuentren en buen estado y sean de corte tradicional. El tejido debe ser azul oscuro, sin aplicaciones ni decoloraciones.
LA VESTIMENTA FORMAL EN LA OFICINA
La prenda máxima: El traje sastre
Ya sea en pantalón o falda, ésta es la pieza clave en los guardarropas de las mujeres más importantes del mundo. En el caso de la falda, se recomienda algo ajustada que estilice las piernas; la medida estándar para el largo son tres centímetros arriba de la rodilla o tres centímetros abajo. Enseñar mucha piel puede transmitir el mensaje equivocado.
Hay algo verdaderamente elegante en una mujer con traje sastre. Expresa confianza y sofisticación. Actualmente los trajes vienen en tal variedad de colores, telas y cortes que pueden fácilmente llevarte del día a la noche, haciéndolos el perfecto traje formal de negocios para las mujeres. Las telas en tonos claros funcionan bien para eventos de día, mientras que las más oscuras son ideales para los eventos de tarde y noche.
Blusas
La mejor prenda para el traje sastre es una blusa. Sin duda la mejor opción son las de seda o satín, y no sólo porque están de tendencia, sino porque su caída ligera y brillo satinado refleja autoridad y elegancia.
El largo sí importa
Es importante optar por mangas largas para un atuendo de poder, aunque si estás en clima más caluroso el largo al codo (3/4) serán las mejores.
Corte y caída
La textura de la ropa y el corte son fundamentales. Entre más gruesa y rígida sea la tela, se proyecta rigidez. Si la tela es más ligera y con un buen corte, se transmite elegancia, sofisticación y flexibilidad.
En confección sin embargo vemos que el corte de princesa que es más estructurado, es una opción segura, ya que viste y complementa muy bien en cualquier ocasión, ya que resalta la silueta de una manera elegante y sutil. Este tipo de corte tiene la ventaja que queda muy bien en la mayoría de los cuerpos.
Complementa con:
El bolso debe ser pequeño o mediano (no a las bolsas grandes). Clutches con asas pequeñas, en texturas naturales; aquí también aplica mantenerse alejado de todo lo plastificado. Sn embargo, ésta puede ser la prenda más juguetona y colorida de todo el atuendo. Evitar los logos y las ostentaciones, preferir materiales naturales y de buena calidad.
Destaca
Al comprar ropa de trabajo, muchas mujeres tienden a ir a la misma tienda. Esto es aburrido tanto para ti como para tu entorno, ya que todas se verán igual que las demás.
¡Lograr que tu estilo sea único sin dejar de cumplir con el protocolo corporativo, sí es posible! Al añadir tu toque personal destacas.
VESTIMENTA FORMAL Y ESTILO CASUAL
La cultura es la que se ha encargado de definir qué vestimenta es aceptable en los diferentes entornos.
Las películas han tenido una gran influencia a la hora de definir estos estilos y también los elementos culturales de cada sociedad han confirmado este hecho.
Por lo tanto, el código de vestimenta formal y el estilo casual provienen de aceptaciones culturales. En una sociedad occidental son muy similares, incluso al comparar un país europeo con un país americano.
ESTILO BUSINESS CASUAL
El business casual es un estilo de vestimenta con diferentes definiciones. Se entiende mayormente como una combinación entre un estilo profesional incluyendo traje y camisa con elementos y modificaciones de un estilo más informal.
Romper un código de vestimenta formal y optar únicamente por el business casual no deber hacerse a la ligera.
COMODIDAD Y ELEGANCIA
Es importante adecuar el vestuario para adaptarse a cualquier situación. Es importante destacar que mientras tengas la opción de elegir, es mejor optar por un estilo más cómodo, antes que un estilo que consideres que es más elegante. Si es cómodo, se siente bien. Y si te sientes bien, lo demostrarás con tu lenguaje corporal agradando a aquellos con los que te comuniques.
Dependiendo de la empresa, es posible que existan parámetros mínimos aceptables sobre cómo ir vestido al lugar de trabajo. En algunas empresas, este requisito es más estricto que en otras y en muchas ocasiones depende del sector.
La imagen es una pieza clave en las relaciones personales dado que es nuestra principal expresión como persona y lo primero que ven los demás. Una vestimenta apropiada ayudará a estrechar lazos y crecer en lo personal y profesional. “No necesitamos la moda para sobrevivir, simplemente la deseamos” Marc Jacobs
La moda hace que las mujeres se sientan poderosas, hermosas y seguras de sí mismas” Victoria Beckham