Alista EU restricción a plantas eléctricas
Emitiría por primera vez regulaciones a CO2 de centrales; enfrentaría oposición
WASHINGTON.- La Administración Biden se alista para anunciar esta semana límites a las emisiones de las centrales eléctricas estadounidenses que usan combustibles fósiles.
Las medidas también podrían incentivar la captura de la contaminación que emiten las plantas, tecnología que utilizan menos de 20 de las 3 mil 400 instalaciones a carbón y gas.
Ésta sería la primera vez que el Gobierno restringe las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de las centrales, que generan el 25 por ciento de los gases de efecto invernadero de Estados Unidos que contribuyen al calentamiento global.
Además, casi todas las centrales actuales y futuras tendrían que reducir o capturar casi todas sus emisiones de CO2 para el 2040.
La regulación seguramente enfrentará la oposición de la industria de los combustibles fósiles, los operadores de plantas de energía y sus aliados en el Congreso.
La propuesta no exigiría el uso de equipos de captura de carbono, una tecnología incipiente y costosa, sino que establecería topes a las tasas de contaminación de las plantas.
De tal forma podrían optar por una tecnología diferente o, en el caso de las plantas de gas, cambiar a una fuente de combustible como el hidrógeno verde, que no emite carbono.
La regulación podría conducir a una adopción más amplia de la tecnología de captura de carbono.
Algunos ambientalistas son críticos con dicha tecnología, argumentando que tiene más sentido cambiar a fuentes de energía eólica, solar y otras fuentes limpias que no contaminan en primer lugar.
La propuesta de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, en inglés) está siendo revisada por la Casa Blanca * y aún podría ajustarse.
Biden espera tener éxito donde fracasó su ex jefe, el Presidente Barack Obama, hace casi una década, ya que trató de promulgar límites amplios a la contaminación de las centrales, pero los bloqueó la Suprema Corte y los revocó su sucesor Donald Trump.
Asimismo, la EPA tiene la intención de ser flexible y planea establecer varios objetivos según el tamaño de la planta, si funciona de forma regular o intermitente, y si ya está programada para su retiro.
Incluso, es posible que algunas plantas de carbón que están programadas para cerrar en la próxima década no tengan que cumplir con los nuevos estándares.
La iniciativa llega inmediatamente después de otros dos planes de Biden para reducir drásticamente las emisiones del tubo de escape de los autos al acelerar la transición a los vehículos eléctricos y frenar las fugas de metano de los pozos de petróleo y gas.