El Heraldo de Mexico

HOY TE CUENTO QUIENES SON LAS PRINCESAS QUE SE CONVERTIRÁ­N EN REINAS

EL FUTURO DE EUROPA LLEVA ROSTRO DE MUJER,

- NUEVAS REINAS nos vemos, La ridícula idea de no volver a verte, LA LITERATURA ES UNA EXTENSIÓN Y REPRESENTA­CIÓN DE LO HUMANO En agosto Una habitación propia

Ha cambiado la ley sálica que prohibía a las mujeres subir al trono.

OHoy son seis princesas las que están en la línea de sucesión en Europa.

OQué es una Reina sin un Rey? Políticame­nte hablando, ¡es más poderosa! Y aunque a lo largo de la historia hemos visto a mujeres extraordin­arias sentarse en los tronos de Inglaterra, España y Dinamarca es hoy cuando los nombres de seis mujeres están listos para plasmarse en los sellos postales de sus países, justo cuando dos grandes reinados, Isabel II de Inglaterra y Margarita II de Dinamarca, llegaron a su fin.

Isabel II de Inglaterra se convirtió en heredera al trono a los 10 años, cuando su tío Eduardo VIII abdicó y su padre se convirtió en Rey, la ley de sucesión la beneficiab­a directamen­te, aunque no nos queda claro que hubiese pasado si sus padres hubieran después tenido un hijo varón, una situación a la que la princesa Leonor se hubiera enfrentado si Felipe y Letizia hubieran dado la bienvenida a un niño tras el nacimiento de la infanta Sofía, y es que la única razón por la que la joven de 18 años será proclamada Reina es por la falta de un heredero varón.

Algo muy diferente a lo que ocurrió en Suecia, en 1977 la reina Silvia y el rey Carlos Gustavo se convirtier­on en padres de una niña, la princesa Victoria, los médicos advirtiero­n que tras un parto difícil la Reina no iba a poder volver a ser madre, el Rey apuro a los ministros para derogar la ley sálica y permitir que su hija reinara, los Reyes se llevaron una gran sorpresa cuando en medio de este proceso la Reina dio a luz al anhelado varón en 1979, pero no se pudo dar reversa, Victoria se convirtió en la heredera, así como su hija Estelle, quien también algún día llevará la corona de la Casa Bernardott­e.

Por otro parte, se encuentra en

La siguiente generación de monarcas será de reinas.

ONoruega la princesa Ingrid Alexandra, que fue muy afortunada, cuando su tía Martha Luisa nació en 1972, la ley sálica aún no se había abolido, así que cuando su padre el príncipe Haakon nació un año después no hubo duda de quien se convertirí­a en el monarca, pero todo cambió cuando en 1990 se abolió la ley sálica. Cuando Ingrid Alexandra llegó al mundo en 2003, el pueblo noruego recibió con júbilo a su próxima reina.

Cosa muy parecida la que ocurre en Bélgica y Holanda, donde se le da prioridad al primogénit­o sin importar el sexo, en Holanda ya existe un historial de matriarcad­o, en el último siglo tres reinas subieron al trono, Juliana, Guillermin­a y Beatriz, quien abdicó en 2003 para dar paso a una nueva generación.

Mientras que Bélgica, actualment­e vive un hecho sin precedente­s, en un futuro tendrán a su primera Reina, la princesa Elizabeth, quien ya se prepara para el cargo. Ya es habitual verla acudir con sus padres a eventos diplomátic­os.

Acasi tres semanas de la publicació­n de el debate en torno a la calidad literaria de la obra ha inundado el panorama cultural y literario. Pero más allá de comparar con sus creaciones anteriores o emitir un juicio sobre su lanzamient­o, la narrativa desarrolla­da alrededor de un personaje femenino y su despertar sexual abre paso para crear conversaci­ones en torno al lugar desde el que se cuenta a las mujeres. En donde Rosa Montero narra sus experienci­as y las de Marie Curie bajo un contexto personal y profesiona­l, la autora afirma que “nuestra identidad también es ficticia, puesto que se basa en la memoria”. De ahí la importanci­a de la literatura y la cultura colectiva en la que nos sumergimos y desde la cual nos nombramos. Virginia Woolf mantuvo siempre una postura negativa y crítica respecto a los personajes femeninos en la literatura masculina. En atribuye el error al hecho de que se les definiera por su relación con los personajes masculinos, y a la limitación de carácter propio.

La literatura es una extensión y representa­ción de lo humano. Es una herramient­a imprescind­ible para medir el cambio, porque en ella se refleja la transforma­ción de ideas y costumbres a través de la historia. En la diversidad de sus narrativas influye el contexto histórico en el que las escritoras han sido minoría, pero también el canon exclusivo escrito por unos cuantos que se ha tomado como universal para entender y definir las experienci­as femeninas.

Por lo tanto, la elaboració­n fallida de un personaje femenino no tiene siempre que ver con el sexo del autor, sino con el nivel en que su perspectiv­a está condiciona­da. Puesto que sus experienci­as, creencias y sensibilid­ades se ven reflejadas en sus personajes, el error recae en el rango de movimiento de su mirada. Aunque no existe un patrón y hay autores masculinos que han creado representa­ciones de personajes femeninos profundos y complejos, es importante sumergirse en la cultura bajo una perspectiv­a de género. Solo así se puede evitar caer en reflexione­s superficia­les y estereotip­adas no solo de los personajes ficticios, sino de nosotros mismos.

Grandes monarcas han sido mujeres como Isabel II y Margarita II.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico