La Mona y La Sirena, casas con forma de mujer
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA.- El dedo meñique alzado representa la posición de Tijuana en el mapa, el brazo es la península de Baja California, el listón sobre el brazo es el agua que llega desde afuera y el cuerpo simboliza la república mexicana, es la escultura “Tijuana Tercer Mileno” de Armando Muñoz, mejor conocida como La Mona.
Esta obra se hizo como homenaje a la ciudad durante su centenario, la idea era colocarla en la casa de la cultura en la colonia Altamira, pero a las autoridades no les interesó, después la ofreció a distintas compañías, pero con ninguna se pudo poner de acuerdo, finalmente la ubicó en su terreno de la colonia Aeropuerto y con el tiempo se volvió un ícono urbano.
“Y ahora me doy cuenta de que fue mucho mejor que no haya sido construida en la casa de la cultura o en alguna empresa porque en todo caso, en cualquiera de los dos escenarios, yo no tuviera ninguna decisión sobre la obra” declaró Armando Muñoz.
Tardó un año y medio en construirla con sus recursos, la inauguró el 22 de marzo de 1990. La escultura de 17 metros está hecha en un 95% de cemento y 5% de fibra de vidrio que componen la cabeza y uno de sus brazos.
“Con recursos propios, mano de obra propia y un solo hombre, en este caso yo como autor pues la verdad no fue fácil” aceptó el escultor.
Armando vivió los primeros cinco años en el interior, el baño estaba en la pierna, la cocina en el estomago, el dormitorio en el tórax y un pequeño estudio en la cabeza, pero con el tiempo se tuvo que salir y construir al lado unos departamentos, en uno de ellos vive actualmente.
Aunque esta casa conocida como “La Mona” se encuentra en un cañón muchos la ubican porque está camino al aeropuerto de la ciudad, pero pocos saben que tiene una hermana en el municipio vecino, en Playas de Rosarito, y se llama “La Sirena”.
EN ROSARITO
Al igual que la de Tijuana, la mona de Rosarito, que es más bien una Sirena, también de Armando Muñoz, terminó en otra ubicación a la de su idea original.
El proyecto surgió a petición de autoridades de Mexicali los primeros años de la década de los 90’s pero por cuestiones políticas no se concretó, por lo que su autor la construyó frente al mar en un terreno de la colonia Marbella, antes Ejido Primo Tapia, al lado de Puerto Nuevo.
“Fue a manera de una celebración o conmemoración de que Rosarito dejaba de ser una delegación de Tijuana y se convertía en municipio” comentó Armando Muñoz.
A diferencia de la de Tijuana, La Sirena tiene espacios más amplios, es una construcción de 5 pisos y en ella vivió Armando también durante varios años, incluso fue restaurante en dos etapas, del 2005 al 2008 y del 2012 al 2015.
“En el segundo piso que es donde estaba el restaurante podemos caber hasta 35 personas sentadas con espacio, cocina y sanitarios, de hecho yo viví en esta escultura aproximadamente como 15 años” añadió Armando.
La Sirena no está terminada pues hacerlo requiere una fuerte inversión pero es una de las metas del escultor. Y en cuanto a La Mona de Tijuana la intención de Armando Muñoz es remodelarla. Dos obras que han cobrado vida propia en la zona costa de Baja California, que se han convertido en Más que una Casa.