El rey de las mareas

Eluniversoextendidodedchaprovocadomásdesairesquealegríasdesde Manof Steel alafecha.eldeseoesque Aquaman, como Mujermaravilla, reivindiqueese universo.yaquídigosilolograono.

Aquaman es uno de los superhéroes de historieta más subvaluados y vilipendiados. No es raro escuchar que se le califique como el personaje con los poderes más “chafas” ni encontrar memes que hagan burla de sus habilidades. Porque, después de todo, ¿qué va a hacer Aquaman? ¿Agarrar a

Darkseid a “atunazos”? Personalmente, desde niño ha sido uno de mis personajes favoritos. Es cierto que, históricamente, muchos guionistas de cómics y de televisión lo han escrito como un personaje plano, desangelado, gris. Pero también ha habido quiénes han comprendido la metáfora “del pez fuera del agua” y han sabido darle textura, conflicto y drama. E, incluso, las cantidades indispensables de humor negro que un personaje así requiere para coexistir en un universo en el que también habitan tipos como Batman o Linternaverde. En este sentido, Aquaman (la película) se anota un triunfo, porque le da a Aquaman la dimensión “cool” que el personaje se merece, mientras abraza todo el absurdo que rodea a la mitología del personaje. Si bien los momentos inverosímiles abundan, los efectos visuales son irregulares y los “plot holes” tienen dimensiones oceánicas, el elenco hace un trabajo tan convincente y el ritmo es tan atrapante, que uno simplemente se deja revolcar por la ola. Aquaman es, como Mujer Maravilla, un paso adelante para el maltrecho DCEU.