“Capacitación y más tecnología forense”
HELIX IVÁN BARAJAS (académico de la Udeg).
Pese a la importancia de identificar los cuerpos que se localizan en fosas clandestinas, la oleada de violencia que se incrementó desde 2012 ha sobrepasado al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), considera el maestro en ciencias forenses y académico del Centro Universitario de Tonalá, Helix Iván Barajas, quien laboró en el IJCF hasta enero de 2017.
Señala que falta tecnología, también capacitación y personal. “Si no tienes recursos humanos no tienes nada. Se necesita más presupuesto… el personal está con jornadas laborales muy pesadas”.
Remarca que la identificación de un cuerpo puede tardar de tres a seis meses porque deben cumplir con trabajos en lofoscopia, odontología, necropsia, antropología forense, genética y radiología.
Explica que la función del perito es, primero, hacer la arqueología forense y extraer el cuerpo. “Después se sigue un protocolo de identificación de personas a nivel nacional. El encargado de identificar a la persona es el médico forense con el equipo multidisciplinario”.
Resalta que entre un equipo integrado por antropólogo, médico y odontólogo pueden lograr hasta el 70% del reconocimiento de un cuerpo. “El resto se va a considerar con el ADN. Hay una base que está conectada a nivel nacional en donde se busca la compatibilidad”.
Cuando se habla de “cuerpo”, recuerda, quiere decir que aún hay tejido; mientras que en los restos óseos es porque el cadáver ya está en los puros huesos o queda algún fémur o cráneo. “La osamenta es porque tenemos el cadáver en su proceso de putrefacción, con un 80% de los huesos”.
De su experiencia en el IJCF, cuenta, lo más gratificante fue identificar los cuerpos para que sus seres queridos pudieran darles un entierro digno. “Poder ver que esa familia ya descansó. Ellos hacen todo por recuperar a su persona querida”.
Si no tienes recursos humanos no tienes nada. Se necesita más presupuesto (en el IJCF)… el personal está con jornadas laborales muy pesadas