FALLECE EL RAYO DE JALISCO
lucha libre, el Rayo de Jalisco
El célebre gladiador fallece a los 85 años de edad por causas naturales
La lucha libre mexicana vuelve a estar de luto con la pérdida de otra de sus grandes figuras, pues la tarde de ayer falleció Maximino Linares Moreno, quien alcanzó el éxito y la idolatría de las masas bajo el seudónimo del Rayo de Jalisco.
Con 85 años de edad, el célebre luchador, miembro del Salón de la Fama de la Tripe A y uno de los grandes ídolos de la lucha libre, falleció por causas naturales y esto causó revuelo en las redes sociales, plataformas que algunos referentes de la lucha libre mexicana aprovecharon para dar sus condolencias a la familia del mítico deportista.
Este fue el caso de El Hijo del Santo, quien lamentó la pérdida de quien fuera uno de los grandes ídolos del cuadrilátero nacional.
“Lamento confirmar el fallecimiento de uno de los más grandes ídolos de la lucha libre, Max Linares, el ‘Rayo de Jalisco’, mi más sentido pésame para mi compañero Rayo de Jalisco Jr y para su familia”, compartió el luchador en su cuenta oficial de Twitter.
En la misma red social la Triple A lamentó también la partida de Linares y deseó que “descanse en paz”.
El legado del Rayo de Jalisco comenzó a fraguarse desde 1950, año en que debutó en el mundo de los encordados. En aquel entonces, en sus inicios, Maximino Linares se desempeñaba bajo el apodo de Misterio, pero más tarde decidió cambiarlo debido al vínculo que generó con la afición de Jalisco.
Entre las batallas más recordadas del Rayo de Jalisco se encuentra aquella en donde hizo mancuerna con Huracán Ramírez para desenmascarar a los Hermanos Muerte.
El 30 de julio de 1989 perdió su máscara con otro legendario gladiador, Blue Demon, en lucha que se realizó en La Monumental de Monterrey, Nuevo León, donde se dio a conocer la identidad de “Max” Linares.
En marzo de 2013 recibió un reconocimiento del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL) en el “Homenaje a dos leyendas”, y un año después ingresó al Salón de la Fama de la empresa Triple A.
Una situación curiosa con el Rayo de Jalisco es que, aunque parezca contradictorio, nació fuera de tierras jaliscienses, ya que era capitalino y llegó a este mundo el 22 de noviembre de 1932.