Toleran transporte escolar “pirata”
Diversas rutas ofrecen en redes servicios por los que cobran cuotas diarias y mensuales; la estrategia oficial cumplirá tres años en pausa
La estrategia promovida en 2015 por la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet) para generar un sistema de transporte escolar comunitario, y reducir la obstrucción de autos cerca de los planteles, aún no ha sido implementada.
Sin embargo, en la metrópoli ya existen “empresas” que ofrecen ese servicio y que no están avaladas por la Secretaría de Movilidad (Semov).
Se anuncian a través de redes sociales como Facebook e incluso con volantes. Las que han sido detectadas vía internet circulan por colonias como Polanco, Morelos, Del Fresno y Echeverría.
La práctica también se identificó en zonas de La Normal y Jardines Alcalde, en Guadalajara; las colonias Auditorio y Víctor Hugo, en Zapopan, y Camino Real a Colima, en Tlaquepaque.
Las personas utilizan sus vehículos particulares para llevar a los estudiantes a sus escuelas y recogerlos a la hora de la salida. Algunos servicios cuestan desde 30 pesos diarios y otros piden cuotas semanales de hasta 400 pesos por alumno.
Estas rutas no operan con la regulación requerida por la Ley de Movilidad y Transporte, sino que lo hacen a manera de negocio personal y, en muchas ocasiones, sin las condiciones mínimas de seguridad, pues en vehículos diseñados para llevar entre nueve y 15 pasajeros llegan a trasladar hasta 20 niños.
Y si bien los padres de familia reconocen que no todos los servicios de este tipo ofrecen seguridad, para muchos de ellos se han convertido en una “necesidad”.
Es el caso de Areli Calderón, madre soltera de un niño que acude a una escuela en la Colonia Los Cajetes, de Tlaquepaque, y a quien no puede llevar por su hora de entrada al trabajo, pero lo envía al plantel gracias al servicio que ofrece una mamá integrante de la mesa directiva del centro escolar.
La Secretaría de Educación Jalisco (SEJ) precisa que no tiene participación en la regulación de los transportes escolares. Indica que su aplicación es responsabilidad de cada escuela.
La Ley de Movilidad del Estado sí contempla el transporte escolar como un servicio “especializado” dentro del transporte público en general.
No obstante, la dependencia desconoce si hay sanciones aplicadas por irregularidades en los traslados que detectó este medio de comunicación.
El Programa de Movilidad Escolar, la apuesta de la Semadet para agilizar el tráfico y reducir las emisiones contaminantes, tendrá que esperar ante la falta de reglamentación jurídica.
Con la finalidad de reducir los traslados que se hacen en automóvil a las escuelas de la metrópoli, y así disminuir las emisiones contaminantes, en noviembre de 2015 la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet) presentó su “Programa de Movilidad Escolar (Prome)”, una estrategia que no verá la luz en lo que resta de la actual administración estatal.
El Prome, se informó en su momento, implementaría “Estrategias de Movilidad Escolar Sustentables (EMES)”, que cada plantel llevaría a la práctica según sus necesidades y entornos a través de un análisis. De acuerdo con el planteamiento original, el pilotaje del programa debía iniciar el segundo semestre de 2016, y durante los primeros seis meses de 2017 se realizarían las adecuaciones legislativas para implementarlo, ahora sí, a partir de julio de 2017, durante el ciclo escolar 2017-2018. Esto no ocurrió, aunque sí se realizó un programa piloto en 11 colegios voluntarios de la ciudad.
Al respecto, el director de Gestión de la Calidad del Aire en la Semadet, Andrés Aranda Martínez, refirió que el Prome ya está listo y sólo es necesario que se cree la norma bajo la cual operarían 54 escuelas privadas y 13 oficiales; a las primeras se les exigiría el programa, al ser identificadas como las que más viajes realizan en autos particulares.
El funcionario explicó que el retraso en la implementación de la estrategia se debe a que la Semadet no ha podido solventar la parte administrativa para su publicación, pues la elaboración del marco jurídico les solicita análisis y documentos específicos que hasta ahora no han sido entregados, además de que aún falta que otras secretarías, como las de Movilidad y de Educación, realicen las observaciones pertinentes.
Prometió que si el Prome no se implementa antes del cierre de administración, el proyecto instrumentado quedará listo para que el arranque se realice en siguiente periodo de Gobierno, en el ciclo escolar 2019-2020.
“Estamos en vista de poder instrumentarlo. Ya el gobernador publicó un acuerdo el pasado 22 de mayo; esperamos tenerlo en un periodo no mayor a dos meses y, una vez instrumentado, implementarlo en las escuelas con un número de alumnos mayor o igual a 500”. El director agregó que, de acuerdo con un estudio desarrollado en conjunto con el Instituto Mario Molina (para el cual el Gobierno del Estado invirtió 1.5 millones de pesos), se prevé que cinco años después de la implementación de los Promes en la metrópoli, reduzcan hasta 25% los agentes contaminantes del aire.