Súperdeportivo exclusivo
Mucho dinero, es lo que se necesitaba para adquirir uno de estos raros modelos
Las marcas deportivas de alto desempeño son por sí mismas excluyentes, pero Bugatti se esforzó para llevarlo más allá con la presentación del nuevo Divo. Este automóvil se basa en el Chiron, pero tiene una serie de cambios que lo colocan como el más apto en la historia de esta joven marca.
Las variaciones principales se encuentran al frente del vehículo, con un nuevo dibujo en los faros, pero la misma parrilla y fascia con pronunciadas aperturas. El cofre es musculoso y tiene una entrada más de aire justo al centro, que además de ser un elemento aerodinámico proporciona un a esencia agresiva. Los laterales tienen branquias marcadas y spoilers casi pegados al suelo, mientras que la parte posterior conjunta un notable alerón; delgadas luces de LED; una salida cuádruple de escape y un difusor inferior vistoso.
Al interior se busca el ahorro de peso, por lo que no existe una pantalla de infoentretenimiento tradicional, aunque si un panel de instrumentos digital. El tablero y otros componentes son de fibra de carbono y todo es forrado en piel y Alcantara con diversos patrones de personalización a gusto del comprador.
El tren motor es el mismo que en el Chiron común, es decir, un propulsor de 16 cilindros y posi- ción en “W” con un desplazamiento de 8.0 litros, mismo que desarrollo 1,500 caballos de fuerza. La potencia se manda siempre a las cuatro ruedas, gracias a la tracción integral permanente y a la transmisión automática de doble embrague y siete velocidades.
Existe una serie de cambios en el ramo mecánico, tal es el caso de la suspensión y chasis, además de las ruedas, pero no se especifican cuales fueron, pero Bugatti afirma que aunque la velocidad tope es menor en el Divo, la aceleración de 0100 es mejor en .1 segundos (2.4 segundos), comparado con el Chiron.
El peso es otro de los aspectos mejorados, ya que en relación con la variante de la que toma base, esta nueva versión disminuye su masa en un total de 35 kilogramos. La reducción de peso se logró con neumáticos más ligeros; sistema de sonido más liviano y una tapa del intercooler hecha a base de fibra de carbono.
Bugatti solo producirá un total de 40 unidades del Divo en todo el mundo, pero todas ellas ya se reportan como vendidas, incluso antes de que comience la producción de este deportivo. Cada uno de los ejemplares tuvo un precio base de cinco millones de euros, el equivalente en pesos mexicanos a más de 100 millones.