Guadalajara y Zapopan prevén triplicar extensión de sus ciclovías este año
l Autoridades proyectan incrementar el número de los pedalistas en la metrópoli
El Instituto de Planeación y Gestión del Desarrollo del Área Metropolitana informó que 39.11 kilómetros de ciclovías estaban interconectados en 2019 en Guadalajara y Zapopan. Sin embargo, con las obras realizadas en este año sumarán 113.36 kilómetros: el triple.
Libertad Zavala Marín, directora de Movilidad y Transporte del Ayuntamiento tapatío, explica que una vez que se concluyan los tramos de la Calzada Independencia y Calzada del Ejército, en Avenida Revolución y el carril “Bus-bici”, en Avenida Hidalgo, estarán unidos 84.28 kilómetros de ciclovías segregadas (el año pasado tenía 36.24 kilómetros conectados). La conectividad en el Oriente se podría dar con Tonalá.
Zapopan tiene 29.08 kilómetros interconectados; hace un año eran 2.87 kilómetros.
Los Ayuntamientos de Guadalajara y Zapopan alistan ciclovías emergentes en los municipios, con el objetivo de ofrecer a los ciudadanos opciones seguras de traslado ante la epidemia por el COVID-19, pensando también en disminuir los contagios.
En la capital del Estado se proyectan rutas en Avenida México, que ya están terminadas, también en el carril “Bus-bici”, en Avenida Hidalgo, entre López Mateos y el Centro Histórico, así como otras vías en el Oriente, que próximamente serán anunciadas.
Mientras que en Zapopan plantean rutas en Guadalupe, Inglaterra y Las Torres, las cuales tendrían 120 mil 164 usuarios potenciales.
Libertad Zavala Marín, directora de Movilidad y Transporte del Ayuntamiento tapatío, remarca que se les llama ciclovías emergentes porque surgen de forma espontánea para atender la emergencia sanitaria.
También enfatiza que “se ha demostrado a nivel internacional que en este momento de la pandemia por el COVID-19 tenemos que ofertar un medio de transporte amigable y que le abone a la salud física y mental”.
En ese sentido, realizar ejercicio mediante la bicicleta ayuda a reducir el exceso de peso y aminora la ansiedad.
“Son puestas de manera inmediata, tal vez no con los criterios de construcción que quisiéramos, como lo hemos hecho en los últimos años en Guadalajara. La ciclovía de Avenida México tiene bolardos abatibles de color amarillo. Y lo que nos ayuda mucho es que los colocamos a una distancia razonable, donde si vas circulando en un vehículo, puedes ver a la distancia que hay un marco y, al ciclista, le da la certeza de que lo van a ver”.
Acentúa que se están haciendo ajustes en conjunto con el Sistema de Tren Eléctrico Urbano (Siteur) para el carril “Bus-bici”, debido a que ese espacio será exclusivo para los ciclistas, camiones de las rutas 1 y 3 del Sitren, además de las calandrias.
Sobre el nivel de seguridad, debido a que no brinda confinamiento mediante una barrera física, la directora acepta que sí existe menos protección.
“Por eso hacemos el énfasis de que son emergentes; por lo tanto, elegimos vialidades que no representan un riesgo alto al tenerlas señaladas con bolardos abatibles y balizamientos o pintura en el piso”.
Añade que en la ruta de la Avenida Hidalgo se han realizado labores de socialización con representantes de colonias. También con los habitantes de las casas o los negocios, quienes tuvieron una respuesta positiva al proyecto.