Exigen que desempleados conserven seguridad social
La diputada capitalina Margarita Saldaña Hernández propuso que las personas que perdieron el empleo a consecuencia de la pandemia del COVID-19, conserven los servicios médicos del IMSS como derechohabientes al menos ocho semanas más, como lo establece el reglamento.
“Esta iniciativa plantea reformar la Ley del Seguro Social, para que la gente derechohabiente sin empleo siga con la atención ocho semanas más, como lo establece la norma”.
Recordó que actualmente el Artículo 109 del citado ordenamiento legal establece este plazo, “pero no se respeta, sino que el Estado lo ha disminuido, con el argumento de que es para no generar gastos extra”, denunció la legisladora.
Por ello, en su iniciativa pide que el asegurado que pierda su trabajo remunerado, “pero que haya cubierto inmediatamente antes de tal privación un mínimo de ocho cotizaciones semanales ininterrumpidas, conservará durante las ocho semanas posteriores a la desocupación el derecho a recibir asistencia médica y de maternidad, quirúrgica, farmacéutica y hospitalaria. Del mismo derecho disfrutarán sus beneficiarios”.
Destacó que “en caso de la ocurrencia de un fenómeno perturbador de carácter geológico, hidrometeorológico, químico, sanitario-ecológico o socio-organizativo declarado por la autoridad competente, no se requerirá que los recursos que se destinen para ampliar el período de la conservación de derechos se encuentren previstos en el Presupuesto de Egresos de la Federación, por ser de carácter eventual y no previsible”, asentó en su propuesta la diputada.
De acuerdo con datos del Inegi y del Banco de México, más de 12 millones de personas perdieron sus puestos de trabajo durante abril y mayo pasados por la pandemia, mientras el IMSS estableció que la crisis económica dejó una perdida histórica de empleos, pues en cinco meses de contingencia se perdieron un millón 117 mil 584 plazas formales.
“Si bien los datos presentados por el Ejecutivo federal distan mucho de coincidir con los de las dos instituciones del país, lo cierto es que millones de familias se quedaron de un día para otro sin recibir ingresos y, además, con un servicio médico con tiempo muy limitado a través del IMSS”.