La competencia por el primer lugar
PEKÍN.- China ha invertido miles de millones de dólares a lo largo de décadas para alcanzar el nivel de potencias espaciales como Estados Unidos y Rusia.
Hasta ahora ha enviado a humanos al espacio, sondas a la Luna y el mes pasado colocó un robot en Marte.
El interés chino de tener su propia base humana en la órbita terrestre fue impulsado por la prohibición estadounidense para que sus astronautas estuvieran en la Estación Espacial Internacional (EEI), y ahora está a pocos días de tener a su tripulación en la Tiangong.
La prensa de ese país informó en octubre pasado que los astronautas fueron seleccionados para las próximas cuatro misiones tripuladas.
Una presencia humana de largo plazo en el espacio será un avance importante para el programa espacial chino. El presidente Xi Jinping calificó la estación espacial china como un paso clave en la “construcción de una gran nación de ciencia y tecnología”, tras el lanzamiento del módulo Tianhe en abril pasado.
La EEI, una colaboración entre Estados Unidos, Rusia, Canadá, Europa y Japón, debe ser retirada en 2024, aunque la agencia espacial norteamericana: la NASA, dice que potencialmente podría seguir en funciones más allá de 2028.
De darse ese retiro, Tiangong sería la única estación espacial en funciones para entonces.
Aunque China no tiene planes específicos de utilizar su estación para cooperación internacional, sus autoridades espaciales han dicho que están abiertas a la colaboración del exterior.