‘Agosto negro’ con 174.000 nuevos contagios, un 344% más que en julio
Simón admite un incremento «importante» y dice que controlar el virus en Madrid «no es fácil»
El mes de agosto cerró con la peor cifra de infectados de toda la serie pandémica. Los 174.336 nuevos casos detectados vía PCR en los 31 días del mes suman un 344% más que los registrados en julio (39.251) y un 37% del total de los diagnosticados en España desde marzo. Ayer Fernando Simón admitió que los datos no son buenos, pero que «no estamos para nada en la situación de los meses de marzo y abril». Sanidad comunicó más de 23.500 nuevos casos de Covid en las 72 horas del fin de semana (viernes a domingo), en las que fallecieron 83 personas.
El mes de julio, que arrancó sin que la palabra brote apareciera en noticia alguna, terminó con 39.251 casos diagnosticados en ese tiempo, una cifra que puso a España en el punto de mira de varios países europeos, que comenzaron a poner restricciones a los viajeros. La sensación era que, si bien ya era tarde para el turismo, agosto tendría que servir para estabilizar la situación. Sin embargo, en el conjunto de España, el nuevo mes concluye con otros 174.336 nuevos casos, un aumento del 344% respecto a julio.
La cifra se explica en parte porque ahora se están haciendo casi el doble de PCR que hace un mes, señaló ayer Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias. Pero el incremento es demasiado elevado: «Queramos o no, tenemos que percibirlo, porque así es, como un incremento en la transmisión», añadió el epidemiólogo desde el Ministerio de Sanidad. Los diagnósticos realizados en agosto representan, de hecho, un notable porcentaje (37%) de los que se han hecho en España desde el inicio de la epidemia, que ya suman 462.858, incluidos los 23.572 que se notificaron desde el viernes hasta ayer. Julio, en contraste, se despidió con 288.522 casos.
La evolución de los casos identificados durante la epidemia en España, siempre con la cautela de que la capacidad de detección ha aumentado progresivamente, dibuja el siguiente panorama al inicio del mes en que se retoma el curso: en marzo se computaron 94.417 casos oficiales (contando los pocos registrados en febrero); en abril, 119.018; en mayo, 25.994; en junio, 9.842. Tras ese mínimo con el que arrancaba el verano, la proliferación de brotes acabó con el sueño de encarar la vuelta al colegio con la transmisión controlada.
La situación, como viene ocurriendo durante todo el verano, es muy dispar entre unas comunidades autónomas y otras. Cataluña y Aragón, las que más padecieron el virus unas semanas atrás, se encuentran estabilizadas, recordó ayer Simón, en contraste con Madrid, cuyas cifras siguen al alza: «Una gran parte de los diagnósticos y las defunciones se deben principalmente a una comunidad autónoma, la Comunidad de Madrid», señaló el portavoz de Sanidad, quien indicó que más de un 20% de los casos notificados corresponden a esta comunidad.
«En cuanto al mes de agosto, yo tengo un sabor agridulce», valoró Fernando Simón sobre el periodo que ayer concluía. En la parte positiva, destacó, además de que las comunidades hayan duplicado las pruebas de diagnóstico que realicen, el variado perfil de los pacientes que se identifican, el cual, a su juicio, proporciona un fiel reflejo de la situación epidemiológica: «Tenemos una distribución por asintomáticos, sintomáticos, hospitalizados en UCI, fallecidos, que nos indica que estamos detectando un volumen muy importante de la realidad de la infección», valoró.
«Eso es lo que nos faltaba antes, ahora detectamos muchísimo. Todo eso bueno, todo eso favorece el sentir de que tenemos capacidad de hacerlo». Citó como ejemplo, además, que se haya podido controlar la transmisión de los brotes en temporeros.
La parte negativa, sin embargo, se encuentra en el amplio volumen del aumento detectado, admitió Simón. «Casos que son muy diferentes a los anteriores, es verdad, pero ha habido un incremento en el número de contagios. Y, queramos o no, nosotros tenemos que percibirlo, porque así es, como un incremento en la transmisión».
El número de casos diagnosticados es ya, de hecho, similar al de los peores momentos de la pandemia, si bien, en esta ocasión, la multiplicación del número de pruebas realizadas hace imposible la comparación. «Ahora mismo estamos en una situación en la que detectamos casi el mismo número de casos que en el pico de final de marzo, primeros de abril. Completamente distinto a los de entonces. Si nuestra capacidad de detección de ahora fuera la misma de entonces, probablemente estaríamos detectando una séptima o una octava parte de lo que detectamos».
Tras valorar los pros y las contras, Simón reconoció: «Pero seguimos teniendo un incremento de transmisión, y eso no nos puede dejar dormir tranquilos, al menos a nosotros (en referencia a las autoridades sanitarias). La gente yo creo que no tiene que angustiarse más de la cuenta. Tienen que estar preocupados, tienen que respetar las medidas de prevención...», matizó. «Lo cierto es no nos puede dejar tranquilos el que veamos incrementarse esa transmisión. Luego hemos visto que, a pesar de que podamos controlar la epidemia, seguimos teniendo zonas muy densamente pobladas, en las que controlarla no es fácil», señaló.
«Tenemos la inquietud de que Madrid es una zona muy densamente poblada, como lo era Barcelona», indicó. Sobre las posibles razones de que esta comunidad padezca en estos momentos los datos de transmisión más elevados, aventuró: «En Madrid no sabemos muy bien si ha sido a la vuelta de las vacaciones de julio. Es una posible razón».
Destacó, además, que todas las autonomías tienen altas y similares capacidades de detección, por lo que descartó que ese pudiera ser un motivo de la elevada incidencia madrileña, que alcanzó ayer los 464,61 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días. «Las razones de esa transmisión son, probablemente, la zona en que se movilizan las personas. Madrid es una ciudad con una movilidad muy alta», argumentó Simón.
De los 23.572 positivos que se notificaron ayer, 2.489 se correspondían a PCR realizada en las últimas 24 horas. La mayoría de ellos se registraron en Madrid (554), el País Vasco (394) y Andalucía (308). Sanidad, que no actualiza sus datos durante el fin de semana, comunicó, además, 83 nuevas muertes desde el viernes.
«A nivel nacional, estamos en una situación relativamente estable», valoró Simón al presentar los nuevos datos, y señaló que Francia se encuentra en una situación «similar». El país galo es el segundo, entre los grandes europeos, con mayor incidencia (87,9), pero aún muy lejos de la española (205,5).