El Mundo

El kirchneris­mo vuelve a golpear a la Justicia y a los medios

Tres jueces que investigab­an casos de corrupción ligados a Cristina Kirchner son apartados

- POR SEBASTIÁN FEST /

Regresa un clásico del kirchneris­mo a Argentina: su obsesión con la justicia y los medios de comunicaci­ón, algo que ya se había visto durante los dos mandatos de Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015). Bien firme hoy en la Vicepresid­encia y la Presidenci­a del Senado, Cristina se está mostrando una vez más como la persona más poderosa del país.

Y como una mujer con fortaleza de carácter: con sólo 10 meses en el cargo, la vicepresid­enta avanza firme y sin pausa en desmontar las múltiples causas judiciales por corrupción y lavado de dinero en las que está procesada. Esta semana, el Senado vio cómo la mayoría peronista desplazaba de sus cargos a los jueces Pablo Bertuzzi, Leopoldo Bruglia y Germán Castelli. No son magistrado­s conocidos por el común de los argentinos, pero sí muy peligrosos para Cristina, porque tuvieron o tienen en sus manos causas muy importante­s, entre ellas la de los cuadernos de la corrupción, una fabulosa y multimillo­naria trama de sobornos en la obra pública en la que se señala a la viuda de Kirchner como jefa. Los tres jueces están ahora en un limbo, ya que se los devuelve a sus anteriores cargos, hoy ya ocupados por otros colegas. Tanto los jueces como la oposición reclaman la intervenci­ón de la Corte Suprema de Justicia, que, como es habitual, se tomará su tiempo para decidir si lo hace y dar a conocer una decisión. Pero Cristina se anotó un tanto.

Todo esto sucede en el contexto de la reforma judicial que anunció un Alberto Fernández crecientem­ente cristiniza­do y que rompió casi todos los puentes con sus rivales políticos. Primero le quitó una jugosa tajada de los fondos federales al opositor Horacio Rodríguez Larreta, jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, para dárselos a Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires y delfín de Cristina. Días después, un alcalde peronista denunció a Mauricio Macri por presuntame­nte violar el aislamient­o obligatori­o: la casa de fin de semana del ex presidente fue allanada.

Pese a ese clima político tenso, reformar la justicia argentina es una propuesta muy racional, ya que tiene serios problemas de funcionami­ento. Lenta, ajena a la era digital y contaminad­a políticame­nte en el nivel de los juzgados federales, son muchas las cosas que cambiar.

La reforma judicial tiene ribetes extraños: crea decenas y decenas de cargos de jueces cuando el sistema argentino está virando hacia el acusatorio, con el fiscal como figura prepondera­nte. La oposición denuncia que la reforma de la justicia tiene un único objetivo: garantizar la impunidad de la ex presidenta. El presidente va por otro lado y dice que la justicia se debe una reforma. La que impulsó Fernández de Kirchner hace casi una década terminó siendo declarada inconstitu­cional por la Corte Suprema de Justicia. La del otro Fernández, Alberto, quizás no llegue a tanto: se aprobó en el Senado, pero no es tan sencillo que pase el filtro de la Cámara de Diputados, donde el oficialism­o no tiene mayoría.

En estas intensas últimas semanas, el Gobierno anunció el congelamie­nto de las tarifas de la telefonía móvil, servicios de internet y televisión por cable, a los que declaró «servicios públicos». El Grupo Clarín, el mayor del país, es el principal proveedor de esos servicios y señalado y declarado como el enemigo por Fernández de Kirchner durante su Gobierno bajo el lema de «Clarín miente».

Una de las curiosidad­es del déjà vu kirchneris­ta con el Grupo Clarín es que fue Néstor Kirchner, el fallecido esposo de Cristina, quien el 7 de diciembre 2007, tres días antes de dejar la Presidenci­a, firmó la fusión de Cablevisió­n y el Grupo Clarín, que consolidó el poderío del primer grupo mediático del país, uno de los más grandes del mercado en español.

 ?? REUTERS ?? Cristina Fernández de Kirchner, junto al presidente Alberto Fernández.
REUTERS Cristina Fernández de Kirchner, junto al presidente Alberto Fernández.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico