Alcaldes del PP en Madrid reclaman una tregua entre Ayuso y Génova
Los regidores de Boadilla, Pozuelo, Majadahonda, Las Rozas y Colmenar piden una tregua
► Los regidores de Boadilla, Pozuelo, Majadahonda o Las Rozas piden posponer el debate hasta después de la convención
La fractura interna del PP de Madrid comienza a provocar réplicas en el ámbito local. Casi todas las alcaldías más importantes del PP de la Comunidad de Madrid –Pozuelo de Alarcón, Majadahonda, Boadilla del Monte, Las Rozas, Colmenar Viejo o Torrejón de Ardoz– entran en el debate sobre el futuro del partido con un mensaje unívoco: que Isabel Díaz Ayuso y Pablo Casado se den una tregua hasta después de la convención y solucionen entonces la batalla por el congreso en el que se dirimirá el control del aparato regional.
EL MUNDO ha recabado el testimonio de cinco alcaldes madrileños del PP, y de ellos se desprende una idea-fuerza, la de demandar una tregua entre Isabel Díaz Ayuso y Génova para no interferir en la convención de «relanzamiento» del PP, que se celebrará del 27 de septiembre al 3 de octubre. Que «ahora no toca». A ellos se les une el de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que es juez y parte pero prefiere darle una larga cambiada a la polémica, por ahora. Entre los seis gobiernan al 54% de la población de la comunidad.
También se han movilizado los portavoces de los municipios del sur de la provincia en los que el PP está en la oposición. En la Puerta del Sol recuerdan que ese argumento de que «ahora no toca» no se lo aplicaron a sí mismos los dirigentes que hablaron de Ana Camins como posible «tercera vía» para presidir el PP de Madrid. ¿Por qué con Camins sí y con Ayuso no toca?, se preguntan.
En medio de este clima enrarecido, hay cruces de llamadas y posicionamientos en uno y otro bandos. Pero entre los alcaldes –que son compromisarios natos del congreso regional– es mayoritaria la petición de posponer las hostilidades para no erosionar la marca PP.
Así lo asegura José Luis Álvarez, alcalde Majadahonda: «No es el momento y me da mucha pena lo que está pasando, con el partido funcionando, con las encuestas viento en popa y ahora que se respira un ambiente ganador. Esta polémica perjudica a la convención, e internamente no es positivo. Hay que cumplir los tiempos [para la celebración del congreso] y hay que llegar a un acuerdo». «No tiene sentido abrir una guerra, tiene que haber una solución pactada», añade.
Susana Pérez Quislant, alcaldesa de Pozuelo de Alarcón, asegura que «ahora mismo hay que centrarse en la convención, que es importantísima y es clave para poder gobernar, y se celebra en 15 días. Todo el partido tiene que estar volcado en la convención en este momento. ¿Después? Pues creo que Ayuso ha hecho un trabajo excelente». «Pero se está eclipsando la convención: el mayor error que podría cometer el PP es que estemos a bofetadas», añade.
El alcalde de Colmenar Viejo, Jorge García Díaz, es claro en su postura: «Los congresos se hacen cuando tocan. Abrir un melón ocho meses antes es prematuro. Sabíamos que tocaba en la primavera del año que viene y abrir este debate nos daña más de lo que nos beneficia. Ayuso está haciendo un gran papel, pero para hablar del congreso es pronto».
José de la Uz Pardos, alcalde de Las Rozas, afirma que será «el año que viene cuando se pueda valorar y decidir» quién lidera el partido y con qué equipo. Y no ahora. «Ahora mismo lo que hay es un Gobierno regional que está haciendo un trabajo espectacular y con una gran tarea por
Los primeros ediles reclaman posponer el debate para no eclipsar la convención
delante, y un partido que es sólido en Madrid». «En realidad de lo que hay que hablar es de la convención y de la alternativa a Sánchez», reclama.
«No tiene que haber tregua, porque no hay ninguna guerra ni va a haberla», asegura Javier Úbeda, alcalde de Boadilla del Monte. «Ayuso ha demostrado que es una muy buena presidenta y es legítimo que aspire a presidir el PP de Madrid, pero yo creo que los madrileños, y ella también, estamos ahora en parar la subida de la luz y en sacar la cabeza de esta pandemia», añade. «El efecto Ayuso se tendrá en cuenta cuando se produzca el congreso; ahora toca la convención, como han decidido los órganos superiores, y toca unidad para echar a Sánchez», remata.