Reformas o choque de fuerzas
La soberanía se encuentra en la asamblea ciudadana y cuando es convocada, busca resolver los problemas de la comunidad como lo plantea Rousseau, apunta Aurora Arnaiz Amigo, autora del libro "Norberto Bobbio sus aportaciones a la ciencia política". Efectivamente, el pasado 6 de junio, la asamblea ciudadana manifestó su voluntad para que cada candidato electo, cumpla las múltiples demandas colectivas.
En el caso específico de la Cámara de Diputados, los mexicanos no otorgaron la mayoría absoluta a ningún partido político, por el contrario, nuestra democracia no es de un solo ganador. El triunfo se depositó en la pluralidad.
Para la próxima LXV Legislatura, el presupuesto federal y los programas sociales, hoy consagrados por nuestra Carta Magna, están garantizados a través de una mayoría simple o calificada ante la eventual alianza entre Morena, Partido del Trabajo y Partido Verde Ecologista de México.
Sin embargo, las reformas constitucionales propuestas por el presidente Andrés Manuel López Obrador como son la reforma electoral, el fortalecimiento a la Comisión Federal de Electricidad y la Guardia Nacional bajo el mando de la Sedena, son una incógnita al no contar con mayoría absoluta. Evidentemente, podemos vaticinar que desde la tribuna parlamentaria habrá de expresarse el álgido debate e incluso la confrontación, el ataque y la denostación. Se enfrentará la izquierda y la derecha, la polarización que fragmenta.
Llegamos a mitad del sexenio y debemos de preguntarnos si se consolidará el proyecto de Nación propuesto por el Presidente de la República o se impondrá el antagonismo de las alianzas opositoras. Esperamos que la mesura y la sensatez se expresen.