Segunda vez encarcelado por Ortega
La más reciente de las detenciones de opositores se produjo el domingo por la noche cuando fue privado de la libertad el periodista Miguel Mora.
Mora, que se convirtió en el quinto aspirante a la Presidencia por la oposición en ser encarcelado, ya pasó seis meses en la cárcel y le confiscaron las oficinas de su canal de noticias a raíz de las protestas masivas contra Ortega en 2018.
Fue arrestado en su casa por “incitar a la injerencia extranjera en los asuntos internos y pedir intervenciones militares”, en base a una ley que el gobierno de Daniel Ortega aplica a los opositores, informó la entidad de orden público.
La primera detenida, el 2 de junio pasado, fue la también periodista Cristiana Chamorro.
ONU EXIGE LIBERACIÓN
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos para América Central y República Dominicana instó al gobierno de Nicaragua a “liberar a todas las personas detenidas arbitrariamente” en el país, tras el arresto del quinto precandidato opositor a la Presidencia.
“La prisión por 90 días, sin control judicial efectivo y sin poder contar con abogados de confianza en audiencia viola” los derechos humanos, indicó el organismo con sede en la Ciudad de Panamá.
En 1019, la Sociedad Interamericana de Prensa premió en Buenos Aires al periodismo independiente de Nicaragua, entre ellos a Miguel Mora, meses antes de su primer encarcelamiento por seis meses (entre diciembre de 2018 y junio de 2019), junto con su jefa de prensa en el Canal 100% Noticias, Lucía Pineda.
En el marco de la revuelta popular de 2018, calificada como un intento de golpe de Estado por el gobierno, se les acusó de incitar al odio y conspiración para cometer actos terroristas, recordaba Douglas Carcacha, subdirector de El Nuevo Diario, en el podcast Periodismo en Riesgo de Organización Editorial Mexicana (OEM), durante una entrevista con Martha Ramos, directora genera editorial de OEM.
Miguel Mora era precandidato a la presidencia por el Partido de Renovación Democrática (PRD, evangélico) al que el tribunal electoral le quitó la personalidad jurídica en mayo, dejándolo fuera de participar en los comicios del 7 de noviembre.
Durante su lanzamiento, Mora adelantó que rompería relaciones con Cuba y Venezuela, abriría una embajada en Israel, y despediría de su gobierno a los sandinistas, excepto a los “que no se han manchado las manos de sangre”.