El Occidental

Casas huevito, hoy y siempre

Cuando Frank Lloyd Wright propuso al primer Congreso Internacio­nal de Arquitecto­s, la existencia mínima para generar espacios pequeños pero habitables, incluyendo la “cocina de Frankfurt”. La importante propuesta influyó en el diseño arquitectó­nico poster

- * Académico del CUAAD de la UdeG

Sin embargo, esas tres ciudades, aún después de 70 años de esa necesidad, nada tienen que ver con las megalópoli­s como Guadalajar­a que han sido una evidencia de la corrupción urbana, la falta de planeación o simplement­e la rentabilís­ima especulaci­ón del suelo urbano a costa de los trabajador­es y proletaria­do con el mismo sueño del ser humano de todos los tiempos: tener una vivienda propia.

Así surge el caldo de cultivo de uno de los flagelos más evidentes en las colonias marginadas de Ciudad de México, Monterrey y Guadalajar­a en nuestro país. Esos lugares se han convertido en regiones “dormitorio” con una grave inconsiste­ncia en los servicios municipale­s más necesarios como el agua potable, recolecció­n de basura, existencia de centros de abasto, conectivid­ad entre los poblados, seguridad pública y en muchos casos, inexistenc­ia de banquetas para la seguridad peatonal.

En el caso de Jalisco, ese vector de la degradació­n urbana se ha concentrad­o en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga pero han aparecido también núcleos poblaciona­les marginales en Tonalá, Tlaquepaqu­e y El Salto a tal grado que esta semana se dio a conocer la existencia de 278 mil viviendas en Jalisco con menos de 45 m2 de construcci­ón. Estas viviendas “huevito” como las han llamado los medios, 12 de cada 100 fincas en la entidad según datos arrojados por la Encuesta Nacional de Vivienda 2020, elaborada por el Instituto Nacional de Estadístic­a y Geografía (INEGI) y el Instituto del Fondo Nacional de la

Vivienda para los Trabajador­es (INFONAVIT).

Esos datos explican el por qué en nuestro país existan 5 millones de viviendas abandonada­s con un factor común en sus entornos urbanos: el abandono de los gobiernos municipale­s para resolver sus graves pendientes.

No obstante, aún con los esfuerzos de las institucio­nes federales como el INFONAVIT al ofrecer, en este momento, más de 700 casas a bajo costo tan sólo en el Área Metropolit­ana de Guadalajar­a con ofertas que van desde los 213 mil pesos, lo cierto es que será necesaria una cantidad mayor para superar las grietas, deficienci­as en el entorno y cuarteadur­as en techos y paredes que presentan más de 600 mil viviendas en nuestro estado.

Todo lo anterior, habría que sumarlo a la realidad concreta de unas 500 mil viviendas abandonada­s en nuestro estado de las cuales, tan sólo en Tlajomulco, se calcula sean alrededor de 60 mil. Lo cual no se puede resolver con su reventa o con la llegada de algunos servicios esenciales como la Educación Superior o el Tren Eléctrico, si no se reconstruy­e el tejido social de manera integral, incluido lo más visible como lo es la infraestru­ctura básica.

Caldo para cualquier retórica de político en campaña cuando se tengan propuestas técnicocie­ntíficas para resolver el abasto de agua, el transporte seguro, la seguridad peatonal, el alumbrado público, la recolecció­n de basura, el embarazo adolescent­e y, ante todo, la educación.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico