Pierden el respeto
Desde las 5:00 de la mañana los contingentes esperaban el arribo del Presidente
En San Cristóbal de las Casas, Chiapas, el Presidente López Obrador fue impedido por integrantes de la CNTE a iniciar su mañanera en un cuartel militar; permaneció dos horas en su camioneta y exigió respeto para poder dialogar.
TUXTLA GUTIÉRREZ. Chiapas recibió al presidente Andrés Manuel López Obrador con tal disgusto que no lo dejaron llegar a su conferencia mañanera. Los inconformes, principalmente maestros de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE), impidieron la llegada de la camioneta de AMLO al cuartel de la VII Región Militar, en la capital chiapaneca.
Desde las 5:00 de la mañana los contingentes esperaban el arribo del Presidente para exponerle sus demandas. Además de la CNTE, llegaron enfermeras del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), a quienes no les renovaron su contrato luego de trabajar en la primera línea de atención al Covid-19 en 2020; las madres víctimas de feminicidio que luchan para que las autoridades en el estado actúen con justicia; transportistas del extinto Conejobus, a quienes les deben pagos atrasados que suman 25 millones de pesos; familiares de Elías Mansur, un policía chiapaneco detenido en Aguascalientes por, dicen sus defensores, un delito que no cometió.
A las 6:00 horas, llegaron a la entrada principal las camionetas del Presidente y sus escoltas, atrás de ésta, dos vehículos más, una suburban dorada y otra camioneta blanca. Las cuatro se detuvieron esperando a que la gente diera paso a los vehículos, mientras tanto, López Obrador, sentado del lado del copiloto con la ventanilla arriba comenzó a saludar a la gente. Hasta ahí todo parecía como las otras giras de AMLO, en las que la gente rodea el auto del mandatario federal antes de que llegue a su evento.
Sin embargo, a 20 metros de la entrada, el tránsito de la primera camioneta blanca fue bloqueado por maestros de la CNTE, quienes tomaron las vallas metálicas que ahí se encontraban y la pusieron frente a ésta para impedir el paso. Militares vestidos de civiles intentaron retirarlas, lo que provocó jaloneos entre maestros y fuerzas de seguridad.
Faltaba una hora para que comenzara la mañanera y el Ejecutivo Federal esperaba con paciencia, pero pasaban los minutos y en su rostro comenzaba a percibirse malestar. Saludó a algunas personas a través del cristal, recibió documentos de todo tipo con la ventanilla semicerrada; desde cartas de agradecimiento como casos de injusticias; hasta firmó un libro y, luego con la ventanilla cerrada de nuevo, gente se acercó a tomarse “selfies”.
Llegaron las 07:00 horas, el sol ya había salido y la conferencia de todas las mañanas de lunes a viernes comenzó sin su protagonista.
A esa misma hora, llegaron otros sectores sociales como los padres de niños enfermos con cáncer, que desde el año pasado se han manifestado por la falta de medicamentos y tratamientos para sus hijos; así como de adultos enfermos de cáncer derechohabientes del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), quienes desde hace dos años costean sus gastos médicos y tratamientos porque no hay abasto de medicamentos.
En ese momento ya eran más de 400 personas, pues se habían sumado estudiantes de las escuelas normales rurales
“Mactumactzá” de Tuxtla Gutiérrez y “Lic Manuel Larrainzar” de San Cristóbal.
Un contingente de la CNTE se acercó a la ventanilla de la puerta del Presidente, éste la bajó y habló con ellos. Luego de un breve diálogo cerró nuevamente su ventanilla. Los maestros cantaron un himno y luego de ello dijeron, “ya conseguimos lo que queríamos, vámonos”, y se retiraron.
Luego de supervisar los avances del Programa Nacional de Reconstrucción con los gobernadores de Chiapas, Oaxaca y la jefa de gobierno de la Ciudad de México, periodistas pidieron unas palabras al Presidente que respondió “Estoy en huelga”, frase que ha usado anteriormente para negarse a opinar sobre temas incómodos como la fallida ampliación de mandato de Jaime Bonilla o los pleitos al interior de Morena.
ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR PRESIDENTE DE MÉXICO “Nos impidieron la entrada, bajo la condición de resolverle sus demandas, esto no lo puedo permitir, porque el Presidente no puede ser rehén”