Retorno seguro a las escuelas y el agua
Las cifras son contundentes. En el mundo, 570 millones de niños y niñas carecen de agua potable en las escuelas; 620 millones carecen de saneamiento y 900 carecen de servicios de higiene.
Es la alerta que envía Unicef a todos los gobiernos para tomar conciencia sobre la importancia de avanzar en las inversiones para brindar una mayor y mejor cobertura de servicios e infraestructura hidrosanitaria a niñas y niños, y garantizar que cuenten con servicios dignos y seguros.
Estos datos cobran aún mayor relevancia en estos días, en que la mayor parte del país está viviendo el proceso de regreso a clases.
Mucho se ha discutido, y con razón, sobre los riesgos potenciales de que las y los niños asistan a los centros educativos sin estar debidamente vacunados en un entorno vigente de pandemia.
Poco se ha puesto atención en las condiciones hidrosanitarias en las que se encuentran los planteles educativos que tras casi dos años se cierre, se encuentran deteriorados, con falta de mantenimiento y en algunos casos vandalizados.
Reflexión aparte merece el dato que presenta la oficina de Unicef en nuestro país, que alerta que sólo 62 por ciento de los planteles educativos disponen de agua todos los días de la semana, el 19 por ciento carece de inodoros suficientes para los estudiantes y el 58 por ciento no cuenta con agua potable.
Si bien en ciudades con mayor nivel de urbanización, como la Ciudad de México, Aguascalientes, Baja California, Colima y Tlaxcala, el 90 por ciento de los centros educativos cuenta con infraestructura adecuada y servicios hidrosanitarios, los contrastes con las escuelas ubicadas en áreas periurbanas y comunidades marginales e indígenas, son alarmantes.
En efecto, de acuerdo con la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu), en las las escuelas primarias de educacio n indígena se tiene menor disponibilidad del servicio para el lavado de manos (39.5 por ciento).
Por su parte las telesecundarias (66.8 por ciento) y los planteles de Educación Media Superior de sostenimiento auto nomo (67.4 por ciento); mientras que las primarias y secundarias comunitarias, pra cticamente carecen de este servicio
En el último ciclo escolar presencial (completo) en 2018-2019, en el país existían 41 mil 283 planteles escolares sin agua.
ba sico, porque las escuelas que cuentan con e l representan so lo 0.03 y 0.5 por ciento, respectivamente.
Mejoredu reporta que en el último ciclo escolar presencial (completo) que se tuvo en México y que corresponde al año 2018-2019, en el país existían 41 mil 283 escuelas de educacio n primaria, secundaria y planteles de educacio n media superior sin agua potable, 16 mil 041 sin sanitarios para uso de estudiantes y 18 mil 680 que operaron sin servicio de electricidad.
Esta radiografía nos muestra una realidad compleja que debe atenderse en nuestro país y lo poco que se ha invertido para mejorar las instalaciones hidrosanitarias y el acceso al agua segura en las escuelas, fundamentablemente públicas.
La propia Organización de las Naciones Unidas ha advertido que un acceso inadecuado a instalaciones para lavarse las manos puede aumentar el riesgo de contagio de Covid-19 y de otras enfermedades infecciosas, no sólo para los alumnos, sino también para el personal docente, administrativo y los trabajadores de los centros escolares. Por tanto, es indispensable atender de manera debida e inmediata esta problemática, para dotar de servicios de agua y saneamiento adecuados al los planteles educativos, así como explorar otras alternativas y soluciones que permitan a las escuelas contar con agua.
En el caso de Agua Capital, para contribuir a atender esta problemática hemos estado impulsando el programa Cosecha Capital en alianza con Isla Urbana, como una solución probada que contribuye a mitigar los riesgos sanitarios con intervenciones en escuelas que favorezcan el acceso básico al agua a través de sistemas de captación de agua de lluvia y de lavado de manos.