Nadie advirtió al IMSS del peligro, asegura Zoé
PACHUCA. Tras asegurar que ni el personal directivo del hospital, ni la jefatura de prestaciones médicas, ni la delegación fueron advertidos, ni oficial, ni informalmente del fenómeno ni su potencial, Zoé Robledo, director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), aseguró que ha sido prioritario el apoyo a deudos, la atención personalizada a familiares y apoyo de gastos funerarios para las familias de las 16 personas que perdieron la vida.
Zoé Robledo detalló que “14 personas fallecieron durante la inundación, y dos pacientes habían perdido la vida horas antes y por motivos distintos. De las 14 víctimas, dos eran mujeres y 12 hombres, con un promedio de edad de 61 años”.
El director del instituto calificó como un día triste para el IMSS por la irreparable pérdida de vidas de derechohabientes. “Un desastre súbito que en cuestión de minutos puso bajo el agua a toda una ciudad, incluido el hospital.”
Explicó que el hospital, de 44 años de antigüedad, fue inaugurado en 1977. Actualmente cuenta con 43 camas censables, así como 21 de urgencias, observación
y terapia intensiva. En la parte alta está la unidad de medicina familiar con 10 consultorios.
Zoé Robledo detalló que al momento del evento 106 trabajadores estaban en turno y aseguró que de haber sido advertidos, el IMSS cuenta con protocolos de evacuación de hospitales con énfasis en áreas críticas, que en los últimos tres años ha permitido realizar 46 evacuaciones, cinco de ellas totales, pero en esta ocasión, insistió, “no hubo tiempo de anticipación”, ya que en un lapso de 20 minutos se dio la inundación del hospital, cerca de las 3:00 de la madrugada del 7 de septiembre.