Arquitecto de emociones
Imponentes construcciones en Guadalajara que te trasladan a los años de 1920 o 1930
El legado del arquitecto Luis Barragán en Guadalajara es único y visitar algunos de los espacios que él construyó a principios del siglo pasado es una experiencia que debe vivirse, tanto por los tapatíos, como por quienes visitan la ciudad.
Y es que al entrar a las fincas, como la Casa Cristo o la Casa Clavigero, que son de las más reconocidas donde el arquitecto tapatío participó, representa trasladarte a 1920 o 1930, cuando la situación en México, tanto política, como social e incluso arquitectónica, era distinta, lo que llena de emociones a amantes de la arquitectura, pero también a tapatíos que simplemente disfrutan de conocer sobre su ciudad.
“Estas casas del movimiento regionalista, que si bien las vemos y podemos vivir y disfrutar, son elementos tangibles, pero no nos damos cuenta de los intangibles, por la etapa por la que estaba pasando México y cómo se pensaba que tenía que ser la arquitectura y Luis Barragán dentro de sus primeras obras empezaba a ser disruptivo con lo que se estaba ha
El sello de Luis Barragán está también en la Casa Franco o la Casa Orozco y todas se ubican en colonias tradicionales de Guadalajara, como la Americana o Laffayette.