El riesgo de perderlo todo
Graciela comenzó a sospechar que era víctima de un fraude luego de que ella y su familia depositaron 90 mil pesos a una supuesta empresa que gestiona trámites para adquirir un inmueble a precios accesibles por medio de un presunto remate bancario.
Ella es una de las miles de personas defraudadas por dos empresas que se constituyen día a día para realizar este tipo de operaciones, con la promesa de entregar una propiedad en una zona inmejorable a un precio accesible y por el que pierden su patrimonio debido a la impunidad para castigar estos ilícitos.
Graciela relató a El Sol de México cómo ella y sus hermanos Esther y Manuel, decidieron juntar sus ahorros a raíz de la herencia que les dejó su madre tras su fallecimiento.
Luego, su padre y líder de la familia, Manuel Casoluengo Mendez, sufrió un accidente de trabajo, por lo que fue indemnizado con 832 mil 468.96 pesos.
Manuel, su hermano, la convenció para que invirtiera ese dinero en un patrimonio. “No, para qué quieres el dinero en el banco, se te va a hacer porquería, y va a ganar Peña Nieto y nos van a quitar las cuentas”.
“Me empezó a mover y a mover, me dio miedo”, comentó Graciela.
Recordó que a su hermano Manuel, un amigo del trabajo le contó de Integra, una empresa que estaba ahí en Polanco, cerca de Mariano Escobedo. El conocido aseguró que le entregaron un departamento, a través de un remate bancario por lo que les recomendó invertir su dinero en ese “negocio”.
Movido por la curiosidad, Manuel invirtió con sus recursos en una propiedad para comprobarlo y al ver que también le habían adjudicado la propiedad volvió a intentar convencer a su hermana Graciela.
El 1 de abril del 2015, Graciela decidió contratar los servicios de una empresa llamada “Comercio e Industria Polanco México S.A de C.V” con nombre comercial Integra, representada por María Elizabeth Vargas Martínez, ubicada en ese entonces en la calle de Euler, número 152, piso 5, col. Chapultepec Morales, C.P. 11570, en la delegación Miguel Hidalgo, que se promovía a través de internet como una empresa inmobiliaria que fungía como intermediaria en la cesión y adjudicación de derechos litigiosos de inmuebles y los promocionaba como remates financieros.
El 3 de abril de 2015, Manuel contactó vía telefónica a la empresa Integra para poder hacer el trato por la cesión de derechos litigiosos y adjudicatarios por el inmueble ubicado en la calle Agustín Melgar número 26, departamento 4, planta baja, en la colonia Condesa, alcaldía Cuauhtémoc.
Convencida, Graciela accedió a invertir con esta compañía, y tras el primer contacto, empleados de Integra le comunicaron: “Danos los 900 (mil pesos). El inmueble está en Condesa y ya está listo para que lancemos a la persona ya”.
“Mi hermano acudió y les dio una parte para invertir, porque se supone que tienes que poner un depósito en el juzgado quinto de cuantía menor. Les da un adelanto y les va dando más dinero”, detalló Graciela. Ese fue el procedimiento que la empresa les fijó para seguir con el procedimiento.
El 10 de abril de 2015 Graciela se presentó en las oficinas gestoras para realizar el trato por la cantidad de 900 mil pesos y efectuar la cesión de derechos litigiosos y adjudicatarios por el inmueble ubicado en la calle Agustín Melgar 26, departamento 4 planta baja en la colonia Condesa.
En presencia de una de las empleadas de la empresa Integra, la víctima realizó una transferencia por 90 mil pesos, como anticipo de la cesión y adjudicación del inmueble a favor de “Comercio e Industria Polanco México S.A de C.V”. Por más de tres meses presionó para adquirir una casa que hasta el momento no tiene.