El partido de nuestra vida
En este mundial de futbol
soccer se dieron sorpresas, nadie pensó que México le ganaría a Alemania, el campeón del mundial pasado. Equipos que eran los favoritos perdieron y regresaron rápidamente a sus países, como Alemania, Argentina, Brasil, España.
También los penalties que fallaron Lionel Messi, Cristiano Ronaldo y otros famosos que son los mejores del mundo. Todavía no sabemos quién será el campeón entre Croacia y Francia. Hemos gozado cada partido y los de México nos emocionamos, pero al mismo tiempo sufrimos.
Este campeonato nos enseña que en la vida debemos luchar y trabajar dando lo mejor de nosotros.
Recuerdo que Emilio Butragueño, amigo de la familia, le llamaban “El Caballero de las Canchas” porque siempre jugó limpiamente y dando lo mejor de él. Cuánta alegría nos dio a todos los celayenses, ya que estando en bajo nivel el equipo, los llevó a la final contra el Necaxa y perdió por el juego sucio y con la ayuda del árbitro Arturo Bricio.
En la vida tenemos que ser íntegros para desarrollar nuestra misión limpiamente, sin patear, sin dar golpes al otro. Cuántos han abusado de otros, no sólo los políticos, también agricultores, empresarios, profesionistas que han oprimido a los pobres, no les pagan lo justo y les cobran honorarios excesivos sin tener sentimiento de piedad.
A nosotros, como a los jugadores, nos van a sacar tarjetas amarillas y rojas por nuestras malas obras y hemos sido expulsados de nuestro trabajo, de grupos de socios o amigos y lo más triste, de la familia, desintegrándola y perjudicando a niños o jóvenes inocentes
Nosotros tenemos un árbitro que no lo podemos engañar y que al de nuestro partido nos juzgará con justicia.