Leonel Martínez, destacado judoka
A su corta edad ha representado a México y desmuestra que tiene futuro en el deporte
Con 12 años de edad, Leonel Martínez Ruiz, ha encontrado en el judo nuevas amistades, pero en especial el entrenarlo y competir hace que se siente muy contento, lo hace sentirse feliz, además de que lo mantiene sano.
Fue hace seis años que se inició en el deporte dentro de las Artes Marciales Mixtas, pero dos años después acudió a ver un torneo del Club Chikai, donde vio como era el trato hacia los judokas, la formación que tenían, la disciplina y los métodos de enseñanza, los cuales eran ideales para niños de todas las edades, fue en ese momento que pidió a sus padres que lo cambiaran al judo.
Una de las cualidades que Leonel tiene dentro del judo es intimidar a sus rivales antes del combate, es especialista en Sasae Tsurikomi Ashi, así como en Harai, tomándolos rápidamente para hacerles un Ippon y así quedarse con el triunfo.
Su primera competencia dentro de esta disciplina fue en el torneo nacional “Daniel Hernández”, en el 2018, realizado en Querétaro, donde logró medalla de plata, así como en el año pasado en el Torneo Panamericano realizado en Guadalajara, Jalisco representando a México dentro de la categoría de menos 47 kilos, colocándose en el tercer escalón del pódium.
Además de ser un deportista de alto rendimiento está enfocado en los estudios donde ha logrado el primer lugar en aprovechamiento en la escuela primaria “Juan Escutia”, llevando de la mano estas dos actividades donde la disciplina que les imparten sus profesores hacen que aproveche al máximo sus talentos.
Leonel Martínez, expreso: “Cuando entreno e siento muy contento, porque entrena me da una felicidad, me hace sentir bien, me gusta estar sano, el deporte es todo para mí porque me han gustado mucho las competencias, donde puedo pelear contra rivales de otros estados o incluso de otros países, mis amigos y entrenadores me apoyan y ayudan mucho, cuando entro a una competencia me siento nervioso y a la vez contento, pero ya cando estoy peleando se me quitan los nervios, siento una felicidad que no puedo describir”.