Asesinan al alcalde de Chahuites, Oaxaca
La Fiscalía estatal investiga el homicidio del edil, quien la semana pasada recibió críticas de petistas
OAXACA. El presidente municipal de Santa María Chahuites, Leobardo Ramos, fue asesinado a balazos por un grupo de sicarios cuando el edil conducía su camioneta en el barrio Juchi, de la colonia San Antonio, de ese municipio.
La Fiscalía del Estado inició las investigaciones con la finalidad de establecer el móvil de los hechos, así como la identidad de los autores del crimen.
Este hecho tiene consternada a la población de Chahuite, que exige justicia, sin embargo, sobre el edil también pesaban acusaciones de enriquecimiento ilícito y el presunto asesinato del activista social Modesto Valencia Baltazar.
Hace un año, Leobardo Ramos fue denunciado por el Frente Democrático Prodefensa del Pueblo ante la Fiscalía General de la República (FGR) y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) por desvío de recursos. Los denunciantes indicaron también que durante su administración no hubo ejecución de obras y adquirió por lo menos tres viviendas con un valor de un millón de pesos.
El edil, emanado de una alianza entre Movimiento Ciudadano (MC), el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido Acción Nacional (PAN), ocupó la presidencia municipal de Chahuites luego de participar en tres elecciones locales.
La administración de Leobardo Ramos estuvo marcada por un discurso xenófobo al señalar a los migrantes como los principales generadores de violencia del municipio que colinda con Chiapas y está a 300 kilómetros de la frontera con Guatemala.
La comunidad de Chahuites responsabiliza al petista Benjamín Robles Montoya y al diputado federal Gerardo Fernández
Noroña de la violencia que generada esta semana en su comunidad, pero sobre todo del asesinato del presidente municipal.
Los habitantes denunciaron que el fin de semana pasado estos dos políticos arribaron al municipio donde realizaron un mitin político y exhortaron a la gente a pedir cuentas al alcalde.
En esa ocasión, Fernández Noroña acusó al edil de mafioso, violento, corrupto y de realizar robos al erario.
En los últimos dos años han sido asesinados cuatro alcaldes oaxaqueños: Alejandro Aparicio, de Tlaxiaco; Carmela Parral, de San José Estancia Grande; Arturo García, de San Felipe Jalapa, y Leobardo Ramos, de Santa María Chahuites.
DENUNCIA LEOBARDO RAMOS fue denunciado hace un año de desviar recursos públicos por el Frente Democrático Prodefensa del Pueblo