ZONA LLANOS DE DURANGO, (OEM). Puede estar equivocado el “Grillo”, pero las personas del municipio de Súchil nos lo dirán, en la historia de ese lugar no había existido peor Administración Municipal que la de Jaime Sarmiento, ¿estamos en lo correcto, o s
Durante toda la administración municipal de Jaime Sarmiento los extrabajadores municipales que eran del PRI, porque trabajaron con quien en su momento fue la presidente municipal priista más joven del país, Lupita Mier, demandaron por despido injustificado. Salió la resolución del Tribunal Laboral ordenando a Sarmiento que se les pagara la indemnización a esos exempleados. Pues nunca lo hizo, se pasó por el arco del triunfo al Tribunal Laboral y todavía buscó que su esposa lograra ganar la elección para seguir en el cargo de alcalde. Claro que no pudo, y menos con la pésima imagen de esa administración municipal, pues todavía se fue y no liquidó ni a sus propios empleados, y hoy el alcalde Abel Santoyo requiere de por lo menos siete millones de pesos para solucionar los problemas que le dejaron, y claro que aparte de este problema tiene una enorme deuda con proveedores y prestadores de servicio, con la gente de la Secretaría de Hacienda le tiene congelados los sellos y varias cuentas bancarias. Vamos, hay una alto riesgo que la misma Secretaría le retenga las próximas participaciones que le llegan al tan fregado municipio de Súchil. Va
mos, no sabe de la que se libró el priista Benjamín Páez, porque este señor Jaime Sarmiento dejó al municipio en completa ruina, sin un peso con qué accionar y aparte con las manos amarradas porque las deudas son millonarias. Aquí es donde la sociedad le está pidiendo, exigiendo, al ahora alcalde Abel Santoyo que busque por todos los medios que Jaime Sarmiento sea llevado ante la justicia, porque lo que le hizo al municipio no tiene nombre, bueno sí lo tiene, pero por respeto a usted amigo lector no lo podemos escribir, porque son hingaderas, ¿o no es cierto?
Claro que todos los municipios tienen problemas y más donde se cambió de partido político, pero en este de Súchil todo indica que rebasó lo que antes se había visto, y más que el profesor Jaime Sarmiento sabemos salió huyendo del país incluso sin terminar el periodo de la administración, se fue antes sin decir adiós por la puerta de atrás, y no sabemos si los que lo defendían a capa y espada ahora piensen lo mismo de su “amigo” el profe Jaime, porque fue una gachada no haberlos liquidado, el no haberles agradecido su apoyo con su liquidación correspondiente, ¿o no es cierto?
Hasta la próxima.