ideas
Cuando Earl Tupper1 inventó el tan socorrido utensilio que lo haría famoso —y millonario—, allá en los lejanos años 50 del milenio pasado, quizá jamás imaginó los rituales — las prácticas y las estampas de la vida diaria— que los mexicanos, a su vez, nos inventaríamos a partir de la convivencia
cotidiana con estos «recipientes mágicos»…