Astros y videojuegos
TLAXCALA
“Lo más significativo que me ha dejado la vida, es ver que cuando le transmites algo a un niño o adolescente que tiene un gusto y no lo ha desarrollado porque no sabe cómo, no se da la oportunidad de buscar información o nadie lo orienta, lo toman y se apasionan y buscan más”, afirma Marco Antonio Romero, estudiante tlaxcalteca que ha tenido la oportunidad de recibir cursos de científicos de Estados Unidos. Oriundo del municipio de Zacatelco, cuenta algo de lo que ha sido su vida académica y de cómo se ha ido abriendo puertas hacia su meta, que es convertirse en desarrollador de videojuegos y que eso, a su vez, sirva para ayudar a la humanidad. En este sentido, relata que su gusto por las matemáticas y la astronomía comenzó en la secundaria, donde ingresó a un club de astronomía a través del programa generado por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla llamado “Del aula al universo”, donde invitaban a escuelas a participar en capacitaciones y los enseñaban a elaborar su propio telescopio con materiales caseros y otras piezas. Aunado a lo anterior, menciona que también tomó conferencias y talleres sobre cómo manejar el telescopio, con lo que decidió formar en su escuela –en 2012- un club de astronomía, con el participaron en noches de estrellas, además de que impartía conferencias para alumnos de secundaria y primaria, donde les enseñaba lo que había aprendido en esas capacitaciones. Posteriormente, en 2013, recordó que comenzaron –como club- a participar en las olimpiadas nacionales de astronomía, donde su grupo fue finalista en las ocasiones que participaron, pero en la octava olimpiada nacional, solo, quedó como finalista. Gracias a eso, explica, obtuvieron la oportunidad para hacer su primera visita a Estados Unidos, al Instituto Tecnológico de California, además de visitar el Monte Palomar, un observatorio que está en Pasadena, California, donde realizaron varias actividades. En ese viaje, también fueron al Jet Propulsion Laboratory donde les dieron un recorrido, tomaron algunas conferencias y les mostraron mucha de la indumentaria que se utiliza en la Administración Espacial Aeronáutica de Estados Unidos (NASA, por sus siglas en inglés), para enviar sondas, satélites y demás al espacio.
“Siempre me llamó la atención saber lo que hay detrás de un videojuego, lo que había y demás”
Relata que su gusto por las matemáticas y la astronomía comenzó en la secundaria, donde ingresó a un club de astronomía
Más adelante, en 2014, participó en el curso Marte y el cometa ,en la Universidad Estatal de Arizona, “ahí me enseñaron cómo aplicar los fenómenos naturales para la enseñanza de las matemáticas, astronomía y esos temas que son a veces científicos, pero que los puedes llevar a un nivel no tan técnico para los alumnos”. Ya en 2015, Marco Antonio acudió a Houston, Texas, a tomar un curso junto con adolescentes de varias nacionalidades, donde hicieron una simulación con un traje de astronauta y cómo se utiliza la impresión 3D para hacer modelos útiles en una misión espacial, y cómo sería un posible gobierno para colonizar Marte. Asimismo, participó en un curso de robótica y alimentación, donde su equipo ganó varios premios. Al mismo tiempo, continuó participando en diversos cursos que ofrecían algunas escuelas en Tlaxcala e impartió conferencias sobre impresión 3D. Actualmente, Marco Antonio Romero tiene 21 años y estudia la Ingeniería en tecnología interactiva en animación digital en la Universidad del Valle de México campus Puebla, carrera que llamó su atención debido a que desde niño los videojuegos han sido parte fundamental de su vida, pues creció con algunos “retros” que ahora ya no se utilizan, pero que en su momento fueron grandes consolas. “Siempre me llamó la atención saber lo que hay detrás de un videojuego, lo que había y demás, entonces me di cuenta cuando fuimos al Centro Espacial Johnson que eso no sólo se podía aplicar en un videojuego, sino también en otros rubros como la educación, porque había aplicaciones que ayudaban a saber respecto a los planetas, las naves y el sistema solar”, rememora. Los planes de Marco Antonio para cuando concluya la universidad son variados, le gustaría especializarse más en lo digital 3D y el desarrollo de videojuegos, le gustaría aplicarlo en algo que pueda ayudar a las personas, más a los niños, pues “cuando se adentran en eso empiezan a despertar esa curiosidad”, o estudiar una maestría en audio, que es algo que también le gusta mucho.