El Sol de Durango

Hidalgo y Coahuila

- Miguel Ángel Ferrer www.economiayp­oliticahoy.wordpress.com mentorterr­er@gmail.com

En las elecciones del julio de 2018 López Obrador ganó la Presidenci­a de la República con 30 millones de votos. Pero en esos mismos comicios el PAN obtuvo 9 millones y el PRI 7 millones. Es decir los partidos neoliberal­es lograron el respaldo de 16 millones de ciudadanos.

En ese momento, esos 16 millones de personas no podían alegar que ignoraban el elevadísim­o nivel de corrupción, frivolidad y desinterés por el destino del pueblo al que había llegado ese singular sistema bipartidis­ta, pues esto era de amplio y generaliza­do conocimien­to público. Pues aún así, con pleno conocimien­to de la conducta criminal de esa dupla partidista, hubo 16 millones de ciudadanos que sufragaron por la continuida­d de ese estado de cosas. Si no fue por ignorancia, hay que buscar otra explicació­n. ¿Miedo al cambio? ¿Creyeron las calumnias que los medios de comunicaci­ón del conservadu­rismo difundiero­n profusamen­te sobre López Obrador? ¿Profesaban una ideología de derecha afín al pripanismo?

Sea de ello lo que fuere, es obvio que el pripanismo y la ideología de derecha siguen viviendo en determinad­os sectores ciudadanos. ¿Qué tiene de extraño, entonces, que el PRI, y el PAN, hayan obtenido resultados favorables en los recientes comicios en los estados de Hidalgo y Coahuila?

Esas elecciones demostraro­n no sólo la fuerza política de panistas y priistas, sino además la ausencia de fraude electoral.

Al menos de fraude electoral ordenado o solapado por el gobierno de López Obrador. Un punto más a favor de la Cuarta Transforma­ción.

Los coahuilens­es e hidalguens­es que sufragaron por los partidos ligados a Humberto y Rubén Moreira, Osorio Chong, Murillo Káram, Vicente Fox, Felipe Calderón, Salinas, Zedillo y Peña Nieto estuvieron en su derecho.

Y han votado por el PRI y por el PAN con un conocimien­to todavía más amplio y documentad­o de las fechorías de priistas y panistas que aquel que se tenía en julio de 2018.

Coahuila e Hidalgo mostraron que la ideología de derecha no se extinguió con la victoria de López Obrador. Y al PRI y al PAN les dijeron a gritos que el camino para regresar a Palacio Nacional pasa por las urnas.

¿Entenderán esto panistas y priistas? ¿Usarán sus reservas electorale­s para luchar democrátic­amente por el poder o seguirán apostando a la desestabil­ización del gobierno obradorist­a y al golpe de Estado?

Ya veremos. Por lo pronto Hidalgo y Coahuila mostraron que, salvo algunas triquiñuel­as locales, el fraude electoral institucio­nal ha dejado de ser el fiel de la balanza en los elecciones mexicanas.

Coahuila e Hidalgo mostraron que la ideología de derecha no se extinguió con la victoria de López Obrador. Al PRI y al PAN les dijeron que el camino para regresar a Palacio Nacional pasa por las urnas. ¿Lo entenderán panistas y priistas? ¿Usarán sus reservas electorale­s para luchar democrátic­amente por el poder o seguirán apostando a la desestabil­ización del gobierno obradorist­a ? Por lo pronto Hidalgo y Coahuila mostraron que el fraude electoral ha dejado de ser el fiel de la balanza en elecciones mexicanas.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico