“Ella era libre de irse”
EN EL CIERRE DEL JUICIO EN SU CONTRA, QUE EL SEXO FUE CONSENTIDO
arcelona.- El futbolista brasileño Dani Alves negó ayer que violara a una joven en una discoteca de Barcelona y aseguró que la presunta víctima era libre de irse "en cualquier momento", durante su declaración en la última jornada del juicio en su contra en la ciudad española.
"Podía salir en cualquier momento, no estaba obligada a estar allí", declaró Alves sobre la joven, y aseguró que él no es "un hombre violento", durante una declaración de alrededor de 20 minutos, en la que solo respondió a su abogada.
"En ningún momento me dijo nada, simplemente estábamos los dos disfrutando", insistió el ex jugador de Pumas, Barça y PSG, de 40 años, quien lleva más de 12 meses en prisión preventiva por los supuestos hechos ocurridos en la noche del 30 al 31 de diciembre de 2022.
La fiscal Elisabeth Jiménez consideró, en cambio, que la mujer presentó un "relato absolutamente creíble" desde que se iniciaron las investigaciones, y aseguró que Alves usó la "violencia" para forzar a la joven, y mantuvo su petición de 9 años de cárcel.
Como en las dos sesiones anteriores, el deportista, esposado, fue escoltado por los agentes hasta la sala. Vestido con un suéter blanco, pantalón oscuro y lentes, siguió la audiencia en silencio y con gesto serio, hasta que pasadas cuatro
Bhoras de sesión llegó su turno.
En un inicio sereno, Alves relató que aquella noche, en la que había "bebido bastante", conoció a la denunciante en una zona exclusiva de la discoteca Sutton, bailaron y, tras surgir una "tensión sexual", le sugirió que fueran al baño.
Una vez dentro, según su versión, mantuvieron relaciones consentidas y, en ningún momento la abofeteó o agarró del pelo, como denunció la joven.
"No soy ese tipo de hombre", agregó el brasileño, que justificó sus cambios de versión durante estos meses por su intento de contar un relato a su mujer.
Podía salir en cualquier momento, no estaba obligada a estar allí. En ningún momento me dijo nada, simplemente estábamos los dos disfrutando"
DANI ALVES JUGADOR BRASILEÑO
POSIBLE EMBRIAGUEZ
Dos psicólogas designadas por la defensa del ex jugador para acreditar que iba ebrio la noche de la presunta violación afirmaron ayer en el juicio que el futbolista tenía las capacidades cognitivas "levemente afectadas", pero "distinguía el bien y el mal y sabía lo que hacía".
Las dos psicológicas han expuesto ante la Audiencia de Barcelona las conclusiones del informe pericial que les encargó la defensa para determinar si el futbolista estaba borracho la noche en que fue acusado de violación.
Según las peritos, Alves tomó con sus tres amigos 5 botellas de vino y una de whisky, posteriormente un gin tonic él solo y, ya en Sutton, pudo beberse también seis copas de champán.
Esta prueba pericial, con la que la defensa de Alves pretende acreditar que el futbolista iba ebrio para beneficiarse de una atenuante, se ha girado no obstante en su contra, a preguntas de Ester García, la abogada de la víctima.
Las peritos han reconocido que el jugador "distinguía el bien y el mal, sabía lo que estaba sucediendo".