El primer cuadro de la ciudad, lleno de comida ambulante
Proliferan negocios de tacos de canasta
Para algunas personas vender tacos de canasta es una salida laboral temporal, útil para contrarrestar el desempleo.
Para otras funciona como una alternativa que suma a la hora de impulsar la economía del comercio, y hay quienes lo encuentran un negocio redondo, pues tiene ya clientela.
También conocidos como “tacos sudados”, se distribuyen en el primer cuadro de la ciudad, en sus características canastas, la mayoría de ellas forradas con plástico azul o transparente y papel de envoltura o trapos de cocina para mantener su temperatura.
Por su precio y la facilidad con que se consiguen, son una opción alimenticia para estudiantes y personas con bajo presupuesto. Se venden a seis tacos por 10 pesos.
Consiste en tortillas pequeñas dobladas con guisado; los ingredientes son: carnitas, papas con chorizo, chicharrón prensado o esponjado, huevo con jamón, y los que no pueden faltar, de frijoles, entre otros.
Estos suelen ir acompañados de una salsa tipo huacamole, morita o chiles acompañados de cebollitas.
Amelia Vera tuvo que dejar los prejuicios y la vergüenza de lado para salir a vender tacos de canasta, en un momento de la coyuntura económica, en que su título universitario de mercadología, no le permitía reincorporarse al mercado laboral.
Sin capital en su haber, empezó ayudando a su tía. Mientras, Inés Hurtado expone que el tener hijos y ser madre soltera es complicado; decidió buscar una actividad que fuera rentable, que le permitiera trabajar cuando sus pequeños están en la escuela.