Con EU, ni guerra ni negociación: ayatola
El líder supremo culpó a Rouhani de la crisis iraní, más que a las sanciones
TEHERÁN, Irán. El líder supremo de Irán, Ali Jamenei, aseguró que "no habrá ni guerra ni negociaciones con Estados Unidos", el mismo día que en Teherán se presentó un nuevo misil balístico que desafía las exigencias de Washington.
En respuesta a las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de volver a dialogar para llegar a un nuevo acuerdo, el ayatola criticó "el cinismo" de Washington, ya que -agregó"además de las sanciones, hablan de guerra y de negociaciones".
"Permítanme dirigirme a la población sobre el asunto en pocas palabras: No habrá guerra, ni negociaremos con Estados Unidos. Esta es la esencia de la palabra que todo el pueblo iraní debe saber", dijo Jameneí en un discurso.
El presidente iraní, Hasan Rohani, también descartó recientemente cualquier diálogo con EU, pero empleó en una ocasión amenazas de corte bélico contra Washington, llegando a advertir de que un conflicto con Irán sería "la madre de todas las guerras".
Para demostrar que su programa balístico es una línea roja e innegociable, el Ministerio de Defensa de Irán presentó una nueva versión del misil balístico "Fateh" (Conquistador), fabricado localmente y probado ya con "éxito".
El ministro de Defensa, el general Amir Hatamí, destacó que este misil de nueva generación es capaz de evadir radares y alcanzar sus objetivos en tierra y mar con precisión milimétrica.
La primera ronda de las sanciones de EU entró en vigor el pasado 7 de agosto, y será seguida de otra el próximo noviembre, que penalizará al sector energético, fuente vital de ingresos de Irán.
Jamenei, cuyas declaraciones estuvieron acompañadas por una fuerte caída de la moneda iraní, el rial, lo que provocó irritadas protestas, criticó al gobierno del presidente Rouhani, un clérigo pragmático que lideró el acuerdo de 2015 con el objetivo de poner fin al aislamiento político y económico de Irán.
"Más que las sanciones, la mala gestión económica (del gobierno) está presionando a los iraníes comunes (...) No lo llamo traición sino un gran error en la gestión", dijo Jamenei. "Con una mejor gestión y planificación, podemos resistir las sanciones y sobreponernos", agregó, en un aparente intento por desviar la ira popular por el deterioro de la economía hacia el gobierno de Rouhani.
Desde su primera elección, Rouhani ha sido atacado por los ultraconservadores.