Fernández denuncia un complot
La expresidenta argentina, compareció ante la justicia, negó corrupción y acusa persecución del juez y el fiscal
BUENOS AIRES, Argentina. La expresidenta Cristina Fernández negó ante la Justicia haber recibido sobornos de empresarios durante su etapa como gobernante, pidió cambiar al juez y al fiscal y apuntó contra el actual gobierno por la "persecución" que dice estar sufriendo y que cree busca su proscripción política.
La exmandataria compareció por el caso de sobornos conocido como "los cuadernos de la corrupción", un escándalo millonario que salpica su gestión y la de su esposo, el fallecido exmandatario Néstor Kirchner, ambos del sector de centroizquierda del peronismo.
Aunque se negó a declarar, la actual senadora -que está aforada y no puede ser detenida- presentó un documento ante el juez Claudio Bonadio, en el que negó los cargos, y apuntó contra él por su supuesta connivencia con el actual Ejecutivo.
Desde que dejó la presidencia en 2015, afirma, le "armaron" seis causas penales, cinco de ellas "iniciadas e impulsadas" por Bonadio. "Decisión política del Poder Judicial -en su más alta expresión- en coordinación con el Poder Ejecutivo y los medios hegemónicos, para ungir a Bonadio como brazo de persecución contra mi persona", sentencia.
Reiteró que es víctima de la "nueva estrategia regional para proscribir dirigentes, movimientos y fuerzas políticas" que "ampliaron derechos y permitieron salir de la pobreza a millones de personas".
Fernández también señaló que "la caída abrupta" de la imagen del gobierno de Mauricio Macri por los problemas económicos del país y por la investigación que el oficialismo sufre por presunta financiación ilegal, han sido "la oportunidad perfecta" para sacar a la luz la causa.