Evalúan otro plan de separación
WASHINGTON, EU. Para el gobierno de Enrique Peña Nieto, la vía de la cooperación internacional con nuestros hermanos de Centroamérica y, por supuesto con el gobierno de los Estados Unidos no es una ruta optativa, es esencial.
De lo que se trata es que todo el buen ánimo de cooperación se traduzca en resultados que reduzcan los indicadores a través de los cuales se manifiesta el fenómeno criminal, afirmó el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray.
En la sesión de seguridad de la Segunda Conferencia sobre Prosperidad y Seguridad en Centroamérica, que tiene lugar en Washington, refirió que para aumentar la seguridad en los países de la región, desde el año pasado, México y EU iniciaron un diálogo sobre la importancia de atacar el modelo de negocio de las organizaciones criminales transnacionales.
Asimismo, manifestó que identificaron que la manera más eficaz para combatir a
Finalizó la
conferencia de seguridad en Centroamérica
estas organizaciones consiste en hacer frente a este ilegal y multimillonario negocio, desde el origen y reproducción del producto, la distribución, los mercados y el financiamiento.
Por su parte, el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, indicó que para lograr mejores condiciones de desarrollo y bienestar en favor de las familias centroamericanas, es indispensable incrementar sus niveles de seguridad.
Navarrete Prida señaló la importancia de redoblar esfuerzos con los países que conforman el Triángulo Norte de Centroamérica, para avanzar, aún más, en el combate a actividades como el tráfico ilegal de personas y el narcotráfico, así como a los grupos criminales y pandillas que tanto dañan a esas sociedades. Notimex
WASHINGTON, EU. La administración de Trump considera un nuevo plan que podría separar a padres e hijos en la frontera con México, a fin de revertir los crecientes números de inmigrantes que intentan ingresar ilegalmente a Estados Unidos, reportó
Una de las opciones bajo estudio es detener a las familias que buscan asilo, mantenerlas unidas durante 20 días, y después darles la opción de permanecer en detención junto a los niños durante meses o años a medida que avanza su caso de migración o que sean llevados a albergues y entregados a otros familiares.