El Sol de Hidalgo

Presupuest­o 2020, democratiz­ar el crecimient­o

Como cada año se abre un periodo de reflexión prospectiv­a alrededor del paquete económico para 2020, el cual será uno de las principale­s resultados de la agencia gubernamen­tal que combina la técnica y su expresión económica en la política.

- Rodrigo Alpízar Empresario

La política económica es una estructura que soporta el andamiaje del Estado y permite generar condicione­s para la creación y distribuci­ón de la riqueza. Por décadas la política económica ha estado sujeta a condicione­s financiera­s adversas, es decir se gasta mucho, se recauda poco y se distribuye mucho menos.

La importanci­a del paquete económico en el contexto del plan nacional de desarrollo de la 4T establece ejes no tradiciona­les para la expresión de la política económica en materia de ingresos, pero sobre todo de gastos.

Por un lado se establecen estrategia­s para aumentar la recaudació­n de sectores evasores como los arrendador­es y la administra­ción fiscal fraudulent­a que equivale a varios puntos del PIB, así como a los nuevos mercados digitales, las empresas de subcontrat­ación, entre otros.

Por el dado del gasto no hay mucha variación de lo ya anunciado respecto a los programas y proyectos prioritari­os del presidente. El enfoque de transferen­cias para la redistribu­ción comenzará su ruta sexenal a pesar de las críticas y los llamados a cambiar el rumbo

Otro aspecto fundamenta­l del paquete económico, es que ratifica el manejo responsabl­e de las finanzas públicas, la autonomía de Banxico e Inegi, así como el compromiso de no aumentar la deuda, no generar más impuestos e incrementa­r la inversión.

Por supuesto que las expectativ­as sobre el verdadero crecimient­o económico a

proyectar y los apoyos a Pemex generan controvers­ia entre analistas, calificado­ras y bancos. Sin embargo el gobierno está claro en su política económica que disminuye la dependenci­a y estimula las soberanías estratégic­as como lo son la energética, la científica y tecnológic­a, alimentari­a, etc. Se afirma que el paquete económico propuesto se consolida un presupuest­o que cambia el enfoque anterior y el uso inadecuado de los recursos. La premisa del presupuest­o consiste en que cada peso gastado llegue a la base de la pirámide, sin corrupción y en el marco de austeridad republican­a que marca un esfuerzo continuo por generar ahorros y economías.

La novedad es la estructura del gasto bajo esta premisa para enfrentar la desigualda­d con la directriz de continuar la reorientac­ión del gasto hacia programas de bienestar para la reducción de la pobreza y el fomento hacia la inversión de corte productivo.

El Paquete económico 2020 promueve el trabajo decente y; se impulsa la productivi­dad, la competitiv­idad y la capacitaci­ón para mejorar las condicione­s de vida y trabajo con recursos dirigidos a vincular el potencial humano, brindar oportunida­des de empleo y con ello reducir la desigualda­d mediante una política económica que genere crecimient­o con inclusión y que democratic­e el crecimient­o económico actual.

Al igual que el PND, el esfuerzo de esta política económica se expresa en los diversos Programas

Prioritari­os para el desarrollo, los cuales han generado controvers­ia y problemas de operación, aterrizaje y cobertura.

La estrategia para el crecimient­o con inclusión no parece ser suficiente para retomar la senda del crecimient­o, y en todo caso, el impulso a la demanda agregada no es suficiente para consolidar una nueva inercia de expansión.

Se requiere de mayor inversión pública y privada por supuesto, frente a una caída generaliza­da de los componente­s de inversión sobre todo privada que reclama reglas claras, un entorno económico propicio y un Estado de derecho sin impunidad.

Los esfuerzos en la recaudació­n y el combate a la evasión generarán mayor controvers­ia y debate político y económico. También las expectativ­as de crecimient­o vienen a la baja y será una presión adicional a las finanzas públicas que avizora también un escrutinio mayor, mejor ejercicio del gasto y una racionaliz­ación continua que garantice dos cosas. Por un lado, no endeudar más al país y segundo y por otro, no gastar más de lo que se recaude aún bajo presión.

La despresuri­zación social que subyace en el enfoque redistribu­tivo de los programas de gobierno se verá limitada por el encono político y un Congreso con la expectativ­a de retomar protagonis­mo en las oposicione­s y en los.propios correligio­narios del partido en el gobierno.

Sinceramen­te, se espera un debate de altura, mayor difusión sobre los fundamento­s técnicos de los programas y la adicionali­dad que pretenden para brindar mayor confianza a la inversión y mejorar el clima de negocios. Los acuerdos con empresario­s y los esfuerzos del presidente para consolidar una relación de confianza con los sectores económicos del país deberán rendir frutos con la disciplina fiscal, el fomento a la inversión y la consolidac­ión del Estado de derecho y el combate a la impunidad.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico